El precio por “levantar la mano”

De acuerdo con datos de la Dirección de Asuntos Penitenciarios del Ministerio de Justicia, unas 1.600 personas aproximadamente están encarcelados por agredir a un familiar, especialmente la pareja del agresor. Esta cifra representa el 15% de la totalidad de los privados de su libertad, que llegan a poco más de 11.000 personas en todas las cárceles del territorio nacional.

De las 1.600, la mayoría están en las penitenciarías en la espera de que su caso tenga sentencia, y un monto reducido tiene una condena firme y ejecutoria, según datos del Ministerio de Justicia.

La conocida abogada y activista de los derechos humanos y de la mujer, Clara Rosa Gagliardone, manifestó que es muy elevado el número de los recluidos por este hecho, hasta consideró que podría ser una suma exagerada.

Añadió que la lucha contra la violencia hacia la mujer tuvo sus avances y retrocesos en los últimos tiempos. “Todo depende, institucionalmente, de que el fiscal investigue, de que acuse, de que el juez dicte una sentencia, es muy complicado. Hay muy pocas sentencias sobre violencia doméstica”, resaltó la activista.

Acotó que hasta ahora muchos miembros de la familia, en especial la mujer, tiene temor de accionar contra el hombre por temor a represalias. “Mucha gente tiene miedo de denunciarlo porque la denuncia hace que la violencia se incremente muchísimas veces. Lucia Sandoval es una excelente ejemplo del tema”, recalcó.

En el primer sondeo sobre violencia intrafamiliar en el país, dado a conocer el mes de febrero pasado, el 89,9% de las mujeres encuestadas respondieron que fueron víctimas de algún tipo de agresión por más de una vez.

Fueron 3.998 las personas incluidas en esta primera encuesta sobre violencia intrafamiliar basada en género (área urbana) realizada por el Centro Superior de Estudios de Administración y Finanzas Públicas para el Desarrollo (Cemaf), a iniciativa del Ministerio de la Mujer, en el marco de un convenio de financiación entre la Unión Europea y Paraguay.

El informe revela además que el 88,1% de las mujeres sufrió daño grave, en comparación con un 11,9% de los hombres. Entretanto, el 80,5% de las mujeres contestó que sufrió violencia psicológica intrafamiliar “más de una vez”, en comparación con los hombres, cuyo resultado llega al 19,5%.

Un dato muy relevante derivado de esta encuesta es que en todos los casos, las mujeres enfrentan mayores violencias físicas, psicológicas y verbales en el embarazo, en la pareja, por negligencia y descuido, y otros casos, en relación a los hombres.

Llama la atención además que una de cada dos personas no ayudó ante hechos de violencia presenciados, donde hombres y mujeres están en la misma proporción y las causas son “miedo a las consecuencias” (39,1%) y “no es asunto mío” (29,6%).

* 1 de cada 4 personas se sintió culpable ante la violencia sufrida.

* 1 de cada 5 personas sufrió violencia intrafamiliar (VIF).

* 1 de cada 6 personas afirmó que su agresor/a estaba bajo los efectos del alcohol u otras sustancias cuando ocurrieron los hechos de violencia verbal.

* 1 de cada 5 mujeres afirmó que estaba embarazada cuando sufrió violencia física, y 1 de cada 4, cuando se trató de violencia psicológica.

* 1 de cada 10 personas deseó causarle daño o lesión a la persona que le agredió.

* 1 de cada 3 personas manifestó que sufrió violencia en público o frente a otras personas.

Cabe recordar que el Ministerio de la Mujer tiene a disposición la línea “SOS Mujer 137” de atención telefónica las 24 horas del día.