Massi terminó muy cansado la prueba de ‘‘arranque’’ y comentó que su Ford Escort WRC ‘‘se golpeó bastante, pero estamos viniendo bien’’. El piloto de la máquina (806) resaltó que el peor enemigo fue el polvo y apuntó las serias complicaciones que se presentaron para los competidores en la prueba especial 9 (estancia Stahl, desvío fortín Garrapatal). ‘‘Fue muy dura esa parte, hubo un trancazo ahí; por suerte se aplicó el enlace’’, indicó Massi acerca del tramo que tuvo a maltraer a los autos.
Acerca de los inconvenientes ‘‘polvorientos’’, afirmó: ‘‘Es ese el problema que tuvimos desde el comienzo; entró totalmente el polvo (en el auto), no podíamos ni respirar, inclusive Hansi (Thiede) perdió la voz, pero esto es parte del Chaco.
El equipo está trabajando bien, vamos a hacer todo lo que se pueda ahora con el auto (antes de ingresar ayer a parque cerrado), porque la segunda etapa se viene más complicada’’.