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En tanto, el presidente estadounidense, Barack Obama, se reunió con los responsables de sanidad pública y seguridad nacional para realizar un seguimiento del caso descubierto en Dallas.
“Debemos repensar cómo controlamos la infección por ébola porque un solo contagio es inaceptable” , declaró durante una conferencia de prensa Frieden.
“Todos debemos trabajar juntos para hacer todo lo posible con el fin de reducir el riesgo de que otro trabajador sanitario se contagie” , añadió.
Frieden no señaló cuáles serán las medidas tomadas. “Lo que vamos a hacer en los próximos días y en las próximas semanas es redoblar los esfuerzos en materia de formación, educación y ayuda” , afirmó.
El director de los CDC dijo el domingo que hubo “una brecha en el protocolo” para explicar la infección de la paciente, una enfermera de 26 años que se ocupó del liberiano Thomas Eric Duncan tras su ingreso por ébola el 28 de septiembre. Duncan falleció este miércoles.
Frieden dijo que los expertos no sabían exactamente cómo se contagió la mujer, que tuvo numeroso contacto con el enfermo pero llevaba el equipamiento (máscara, guantes, traje de protección) recomendado por los CDC.
Los centros continúan vigilando a otros sanitarios del Texas Health Presbyterian Hospital de Dallas para ver si alguno de ellos desarrolla síntomas de la enfermedad, para la que no existe ninguna vacuna ni tratamiento homologado.
La Unión Nacional de Enfermeras, principal sindicato del sector en el país, pidió este lunes mejores equipamientos para protegerse, así como un entrenamiento adecuado para el tratamiento de la enfermedad.
Un portavoz dijo a la AFP que las enfermeras quieren acceso a trajes de proteción y dijo que muchos profesionales preguntados por ellos no habían sido guiados por sus hospitales sobre cómo manejar los casos de ébola.