Fuertes disturbios en protesta en Venezuela

En otra marcha de miles de venezolanos contra el gobierno de Nicolás Maduro, las fuerzas gubernamentales volvieron a impedir que la manifestación avance hacia el centro de Caracas, produciéndose violentos choques.

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CARACAS. Un camión de la militarizada Guardia Nacional lanzó una batería de gases a los manifestantes en Chacaíto y en El Rosal, en vías de acceso a la estratégica autopista Francisco Fajardo, tras acudir en refuerzo de la Policía y hacerlos retroceder, apoyados por blindados y camiones que tiran chorros de agua.

“No me importa tragar gas, no me importa morir, pero tenemos que salir de esta mierda de gobierno asesino y represor”, dijo Natasha Borges, de 17 años, en medio del caos.

El grueso de la manifestación se replegó hacia el este de la ciudad, pero un grupo de jóvenes manifestantes, con los rostros cubiertos con pañuelos y capuchas, se mantenía lanzando cócteles molotov y piedras.

Un helicóptero de la Policía sobrevolaba la zona. Barricadas de basura eran quemadas en distintos puntos y algunos destrozaron una valla publicitaria para usar los restos de trinchera.

Al grito de “Libertad”, o acusaciones de “malditos” y “cobardes”, a los efectivos policiales, protegidos con chalecos, cascos y escudos antimotines.

Desde primera hora de la mañana, con tanquetas y barreras metálicas, contingentes de policías y militares fueron desplegados en vías importantes de Caracas, donde ayer también se reprimieron manifestaciones contra el gobierno.

En esa jornada murieron un adolescente de 17 años en Caracas y una joven de 23 en San Cristóbal (fronteriza con Colombia) y un militar en las afueras de la capital. También hubo saqueos en El Paraíso, oeste de la capital, por lo que algunos comercios no abrieron hoy.

 

Acumlación de los poderes

La ola de protesta se desató el 1 de abril, tras sentencias del máximo tribunal (autodeclarado chavista), que retiró la inmunidad a los diputados y se adjudicó las funciones del Parlamento (donde los opositores fueron elegidos con el 70% del voto popular).

Maduro volvió a denunciar un enésimo supuesto intento de golpe de Estado y una invasión de Estados Unidos, algo que el Gobierno denuncia casi cada semana, desde hace años.

Su aliado, el mandatario boliviano Evo Morales, secundó a su colega venezolano, acusando a Washington de planear el derrocamiento de Maduro, cuyo mandato termina en 2019.

 

Falta de elecciones

Las elecciones de gobernadores debieron realizarse en 2016, pero fueron suspendidas y aún no tienen fecha, las de alcaldes están pautados para este año, pero tampoco se han fijado aun, y las presidenciales deberán realizarse en diciembre de 2018.

Según las encuestas, siete de cada diez venezolanos reprueban el Gobierno, asfixiados por la crisis económica, con una severa escasez de alimentos y medicinas, y una inflación –la más alta del mundo– que calculada en 720% para este año.

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