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La próxima Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), el gran encuentro de los jóvenes católicos, a la que suele asistir el Papa, se celebrará en Río de Janeiro (Brasil) en 2013, informó este viernes el portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi."Como todos saben, la próxima JMJ será en Río de Janeiro en 2013", declaró Lombardi, quien precisó que el anuncio será hecho por el mismo Benedicto VI en forma solemne el domingo 21 de agosto al término de la JMJ de Madrid.
La edición en Río de Janeiro se llevará a cabo con un año de anticipación, en el 2013 en vez del 2014, para evitar que coincida con la Copa del Mundo de Fútbol que se disputará en Brasil en el 2014.
Río de Janeiro, ciudad emblemática del mayor país católico en el mundo, fue escogida en lugar de otra candidata, Seúl, la capital de Corea del Sur, país que cuenta con una gran comunidad católica, indicaron fuentes de prensa.
Para el país sudamericano, será el tercer gran acontecimiento que deberá organizar en los próximos años, junto al Mundial de Fútbol en 2014 y los Juegos Olímpicos en 2016.
La JMJ se celebra cada dos años y la próxima, la 26ª edición, se llevará a cabo del 16 al 21 de agosto en Madrid (España).
Más de un millón de jóvenes provenientes de todo el mundo deberán asistir a la ceremonia de clausura presidida por el papa Benedicto XVI.
La edición en Río de Janeiro se llevará a cabo con un año de anticipación, en el 2013 en vez del 2014, para evitar que coincida con la Copa del Mundo de Fútbol que se disputará en Brasil en el 2014.
Río de Janeiro, ciudad emblemática del mayor país católico en el mundo, fue escogida en lugar de otra candidata, Seúl, la capital de Corea del Sur, país que cuenta con una gran comunidad católica, indicaron fuentes de prensa.
Para el país sudamericano, será el tercer gran acontecimiento que deberá organizar en los próximos años, junto al Mundial de Fútbol en 2014 y los Juegos Olímpicos en 2016.
La JMJ se celebra cada dos años y la próxima, la 26ª edición, se llevará a cabo del 16 al 21 de agosto en Madrid (España).
Más de un millón de jóvenes provenientes de todo el mundo deberán asistir a la ceremonia de clausura presidida por el papa Benedicto XVI.