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El ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, envió el miércoles una nota a su homólogo estadounidense, Jim Mattis, en la que le pedía este diálogo, pero aún no recibió ninguna respuesta formal, según informó Moscú.
“Todo esto refleja la reticencia de Estados Unidos a un diálogo razonado y profesional con Rusia para resolver los problemas urgentes de seguridad regional e internacional”, indicó el ministerio en un comunicado.
Estados Unidos dio a principios de diciembre un ultimátum a Rusia, en el que otorgaba a las autoridades rusas dos meses para adaptarse al INF.
Si no lo hacían, advertían que se retirarían del acuerdo.
Washington y la OTAN acusan a Moscú de violar el INF a través de un nuevo sistema de misiles, unas acusaciones consideradas “sin fundamento” por parte de las autoridades rusas.
El tratado INF, firmado por los entonces presidentes soviético, Mijaíl Gorbachov, y estadounidense, Ronald Reagan, prohíbe el uso de todo tipo de misiles de un alcance de entre 500 a 5.500 kilómetros.