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Un tribunal de sentencia integrado por los jueces Gloria Hermosa, Alba González y Blanca Gorostiaga condenó a Tomás Rojas Cañete, alias Toma’i, por tenencia y tráfico de drogas (en calidad de autor), lavado de dinero y asociación criminal a 25 años de pena en la penitenciaría Nacional de Tacumbú. La misma será compurgada en el año 2036.
También fueron condenados por tenencia, tráfico y comercialización de drogas, asociación criminal, Fermín Centurión Godoy y Ángel Tranquilino a 21 años de cárcel, Antonio Marcos Carvallo a 20 años de pena, Cirilo de León a 18 años, Marino Salinas Torres, guardia de seguridad a 10 años de cárcel, y Robert Lesmo García, de profesión profesor a 18 años de pena.
La lista continúa con Mario Antonio Arévalos, suboficial primero a 16 años y 8 meses de cárcel, Aldair Pozzamai Davis, agricultor, 18 años, Ignacio Rojas Cañete (hermano de Toma’i), de profesión albañil, a 15 años de pena, todos guardarán reclusión en el penal de Tacumbú.
Por compurgamiento de su pena quedaron en libertad, Teodoro Dávalos, quien fue condenado a 2 años y cinco meses, Herminio Aguilera Benitez, chofer, 4 años de pena y Guillermo Dávalos Fernández, estudiante a 4 años de pena.
Los fiscales Elva Cáceres e Isaac Ferreira solicitaron 25 años de cárcel para el mismo, mientras que para su hermano Ignacio Rojas Cañete, pidieron 10 años. Esta causa se inició a partir de operativos simultáneos realizados el 3 de setiembre de 2011, ocasión en que se logró detener a José Tomás Rojas con una carga de 100 kilos de cocaína que fue encontrada en el club Acosta Ñu de la Liga Paranaense, en cuyo interior había un laboratorio, con la prensa, la mezcladora y otros elementos para el proceso de aumentar el contenido. Rojas era el presidente del club y junto con él fueron procesadas más de 10 personas.