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El Tribunal de Apelaciones de la ciudad de Caazapá, presidido por Ramona Troche de Haurón e integrada por Cinthia Ramírez de Melgarejo y Claudio Villalba, confirmó íntegramente el sobreseimiento definitivo del periodista de ABC Color del departamento de Caazapá, Antonio Caballero, quien fue denunciado en junio del 2008 por supuesto caso de extorsión presentado por una comerciante identificada como Beatriz Gamarra.
Es el acuerdo y sentencia número treinta de fecha 26 de septiembre de este año, por el cual se confirmó la sentencia de sobreseimiento definitivo sin culpas y penas para el periodista Antonio Caballero, que había sido resuelto durante un juicio oral que se realizó en el Palacio de Justicia de la ciudad de Caazapá el pasado 12 de mayo de este año.
En el juicio oral el Tribunal Colegiado estuvo presidido por Antonio Molinas e integrado por Ernesta Nelly Alderete y Osvaldo Rivas. El fiscal acusador fue Luis Piñanez. El mencionado proceso había comenzado con el fiscal Arnaldo Guzzio y Bernardo Elizaur, de la ciudad de Villarrica.
Giuzzio dejó la Unidad Anticorrupción para candidatarse a una banca en el Senado, mientras que Elizaur directamente abandonó el cargo.
El periodista Antonio Caballero tuvo como abogados defensores a Jorge Sale Altamirano y Luis Gutiérrez de la defensoría pública. Igualmente fueron defensores del periodista Norma Girala, Hermes Rafael "Rambo" Saguier, ya fallecido y Antonia Amarilla.
En el juicio oral la denunciante inclusive presentó a varios testigos falsos quienes intentaron por todos los medios complicar al periodista en el supuesto hecho de extorsión. Pero la misma denunciante bajo juramento admitió que nunca recibió pedido de dinero del periodista sino que ella lo ofreció mediante la intermediación del entonces fiscal del medioambiente del departamento de Caazapá, Vidal Sánchez.
El juez de garantías César Acosta durante la audiencia preliminar ya había decidido el sobreseimiento definitivo a raíz de que el delito no se había configurado teniendo en cuenta que la misma denunciante en su escrito de querella, presentado mediante el abogado German Latorre, admitió que el periodista nunca le pidió dinero y en vista que en varias oportunidades fue publicado en la garita como Betty la loca, decidió armar la celada ofreciendo el dinero mediante el exfiscal Vidal Sánchez, quien admitió el hecho y solicitó un juicio abreviado y fue condenado a prueba por dos años, tres años de prohibición de ocupar cargo público.
El sobreseimiento definitivo dictado por el juez César Acosta fue apelado y el tribunal confirmó la sentencia. Entonces Giuzzio recurrió a la Corte solicitando casación, que fue admitida después de dos años volviendo el caso a un tribunal de Caazapá con el resultado ya conocido.