Cruz Roja: Condición “traída de los pelos”

Para representantes de la Cruz Roja Paraguaya (CRP), las condiciones establecidas por el presidente de la organización, Luis Díaz de Bedoya, para renunciar al cargo, son inaceptables y totalmente “traída de los pelos”.

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Tras publicaciones periodísticas y recomendación del Comité de Cumplimiento y Mediación de la Federación Internacional de la Cruz Roja, Díaz de Bedoya anunció que renunciará a la presidencia de la CRP toda vez que hagan lo mismo todos los miembros del Comité Central y Ejecutivo del organismo, como también que ningún directivo actual (presidentes de filiales) se candidaten para ocupar el cargo que dejaría vacante.

“Eso es algo traído de los pelos”, aseveró el presidente de la filial de Concepción, Elvio Valiente, quien criticó las condiciones establecidas por Díaz de Bedoya para su salida.

“Es la novena vez que lo hace, ya lo hizo en varias ocasiones y siempre pone condiciones que no corresponden. Él ya cumplió su ciclo en la Cruz Roja”, manifestó el directivo, en comunicación con ABC Color.

Indicó que en Concepción inauguraron este viernes una guardería infantil, que es mantenida con fondos propios. “Nuestro presupuesto para esa guardería es de G. 40 millones por año y eso lo cubrimos con chorizadas y cualquier actividad entre los voluntarios. Imaginate que en la Sede Central más de G. 40 millones solo se gastaron en bebidas y festejos según el último balance”, lamentó Valiente.

Reiteró que el presidente de la Cruz Roja debe renunciar sin condición alguna. “El estatuto no establece una condición para que él renuncie. Él, desde el momento que la asamblea le rechazó su informe y balance, perdió confianza con toda la masa societaria de la Cruz Roja Paraguaya”, concluyó.

En tanto, el presidente de la filial de la CRP de Cordillera, Ángel Pintos, manifestó que la gestión de Díaz de Bedoya está lesionando la imagen de la organización.

Consideró que el cuestionado directivo está abierto a dejar la institución, sin embargo apuntó a su hijo Carlos Díaz de Bedoya, actual director de la Asesoría Jurídica de la CRP y de su esposa, Celeste Lara Castro, directora de Cooperación y Relaciones Extranjeras, de ser los que impiden su salida “por no querer dejar la mamadera”.

“Él no tiene problemas en salir, el problemas es su entorno, su colita nomás es el problema. Su hijo y su nuera, son dos personas los que interfieren en esta situación, lastimosamente”, aseguró el directivo, en diálogo con nuestro diario.

Resaltó que la única salida para renovar la imagen de la organización es que Díaz de Bedoya renuncie a la presidencia sin condición alguna. “El problema de la Cruz Roja es la corrupción, hay que levantar el 'cadáver' que tenemos”, sentenció.

En otro momento, Pintos pidió al síndico de la CRP que convoque a una asamblea de los asociados para destituir al titular de la institución, atendiendo la cantidad de reclamos por parte de los presidentes de filiales.

En comunicación con el Dr. Roque Fanego, síndico de la CRP, este manifestó que no recibió ninguna nota de Díaz de Bedoya en la que presente su renuncia. Sí comentó que está al tanto de que estableció condiciones para abandonar el cargo, pero nada de manera formal, por lo cual todo sigue en pie.

Manifestó que el Comité Ejecutivo de la organización es el que debe convocar a una asamblea extraordinaria, en caso que sea necesaria.

El caso de despilfarro en la Cruz Roja Paraguaya salió a flote con la compra de una botella de whisky, que finalmente solo era "la punta del iceberg". Documentos arrimados a nuestro diario demostraron millonarios gastos en bebidas alcohólicas, flores y viajes, además de compras de medicamentos por elevados montos para fines particulares.

Además, una auditoría externa hecha por la firma TMG a la administración del año 2013 de la CRP; demostraron que millonarias sumas de dinero eran utilizados sin factura que demuestren el destino de los gastos, como también alertó sobre el peligroso déficit económico que arrastra la institución hace casi una década.

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