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“Fue un hecho bochornoso y lamentable episodio. Me tiró el cinto, me rozó con el cinto y me derramó agua y por último, cuando se terminó la audiencia, defecó en mi despacho”, explicó el magistrado Amílcar Marecos.
Indicó que pese al incidente se realizó la audiencia de imposición de medidas y que en el transcurso de la tarde dará a conocer su decisión en el proceso que se le investiga tras pintar grafitis con aerosol en la sede fiscal.
“No fue afectada la diligencia procesal, pese a todos los incidentes que protagonizó el procesado. Se realizó todo según dice la ley, se le leyeron sus derechos, sus abogados estaban presentes y yo dí por terminada la diligencia”, dijo el magistrado.
En otro momento explicó que conoce al abogado Paraguayo Cubas desde la infancia y entiende que solo realizó todos estos incidentes por que pasa por un momento de mucho estrés.
“No voy accionar contra el abogado, porque creo que solo estuvo un poco alterado y más”, finalizó el juez Marecos.