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Paola Dos Santos denunció a ABC Color que tras un choque en el cual se vio involucrado su vehículo y una unidad de la línea 26, de la empresa “Lince”, ocasionado por imprudencia del conductor del bus, un agente de la comisaría 2da Central-Fernando de la Mora de nombre Adrián Viveros, en una actitud prepotente la habría insultado por haber exigido la prueba de alcotest.
“'Vos loquita necesitás atención psicológica' me dijo por pedir que al chofer le hagan la prueba. Incluso me mostró el dedo del medio”, denunció la mujer.
El accidente de tránsito se produjo aproximadamente a las 19:00 del sábado en la Curva de la muerte sobre la avenida Mariscal López. La mujer sostuvo que el conductor del bus se rehusó a concurrir a la sede policial, con el consentimiento de los uniformados intervinientes que se constituyeron en el lugar a bordo de la patrullera con placa EAF 831.
Dos Santos indicó que esta situación fue traumática tanto para ella, sus hijos y su madre que iban en el vehículo de marca Toyota tipo IST.
Por su parte, el subcomisario Juan Ruíz, subjefe de la comisaría 2da, admitió que la mujer solicitó la prueba de alcotest, sin embargo, los agentes intervinientes consideraron que no era necesario practicarla teniendo en cuenta la lucidez del conductor del bus.
“Se hizo el procedimiento, se labró acta y todos los pasajeros se bajaron. Luego el chofer siguió su camino”, informó a este diario el agente del orden.
En referencia a las idas y venidas entre los intervinientes y la mujer, Ruiz indicó que sus camaradas le informaron acerca del altercado y que “la situación se descontroló” pero que no pasó a mayores.