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La población más cercana Toro Pampa se localiza a unos 100 km. Las personas del lugar se dedican a la cría del ganado en pequeña escala. Gran parte del año sus caminos son inaccesibles y por supuesto carecen de servicios sociales considerados básicos como energía eléctrica o agua potable.
Los niños y jóvenes en edad escolar son enviados a la escuela internado Ñu Apua, donde completan la educación secundaria para luego regresar a la comunidad y ayudar a sus padres en la tarea pecuaria.
Los moradores de esta población son los que en varias oportunidades denunciaban que los dueños de los grandes establecimientos ganaderos existente en los alrededores procedían a colocar portones candadeados en los caminos que desde siempre utilizaban en busca de llegar a los centros urbanos, por lo que deben transitar por otros senderos lo que significa hacer varios kilómetros de más.
Doña Ciriaca Cabañas, antigua pobladora del lugar, lamentó una vez más la situación de abandono de parte de las autoridades en la que se encuentran desde hace años.
"Nadie se preocupa por la suerte que vivimos a pesar de que con nuestro trabajo tesonero y honesto realizamos patria por estos lejanos lugares", dijo la mujer.
La mayoría de las comunidades del departamento ya fueron asistidos por la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) con el envío de kits de alimentos, sin embargo una vez más y como siempre suele suceder de nuevo se olvidaron de nosotros, dijo la entrevistada.
El viaje a caballo, única forma de salir de este sitio, dura varias horas e inclusive días, hasta un camino público donde se aborda un vehículo para llegar a Loma Plata o Filadelfia, en el departamento de Boquerón, ya que es imposible viajar hacia Olimpo, relató.
La única manera en que estas personas puedan recibir la ayuda es abordo de helicóptero tal como se realizó en el 2014, sin embargo hasta ahora y a pesar de la promesa de las autoridades siguen sin ser asistidos.