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El fiscal de Delitos Económicos Aldo Cantero había imputado a Gladys Cardozo por lesión de confianza en calidad de autora y a Aníbal María Benítez por lesión de confianza en calidad de cómplice. El caso se remonta a hechos ocurridos durante una emergencia declarada por la sequía en el año 2012.
Según la denuncia realizada por la Contraloría, en las auditorías realizadas se encontraron irregularidades en el marco de contrataciones directas celebradas entre la Secretaría de Emergencia Nacional, representada por la ministra Gladys Cardozo Zacarías, y las firmas Beltrom S.A. y Distribuidora Fénix S.A., a los efectos de la adquisición de productos para personas en situación de emergencia alimentaria.
La SEN pagó G. 301.650.000 a Fénix S.A., representada por Nancy Lucina Godoy, por la provisión de 50.000 kilos de arroz y 30.000 kilos de yerba. Sin embargo, un informe de la Contraloría General da cuenta que pagó G. 36.900.000 más de su real valor del mercado. Esta situación se repite con el pago de G. 298.432.727 a la firma Beltrom S.A., representada por Teresita De Jesús Torres, por la provisión de 15.000 kilos de arroz, 15.000 kilos de azúcar y 15.000 litros de aceite. Según Fiscalía, se pagaron G. 103.800.000 de más.
La fiscala Victoria Acuña había imputado a Cardozo por lesión de confianza e indicaba en su imputación que las adquisiciones se concretaron en el primer semestre de 2012 y resultaron adjudicadas las empresas María Gloria S.R.L., Beltrom S.A., MF Industrial y Comercial S.A. y Distribuidora Fénix S.A.
La Fiscalía sostiene que dichas firmas proveyeron arroz, azúcar, aceite, fideo, yerba y poroto a un precio muy superior al vigente en el mercado en la época referida. El Ministerio Público estimó en G. 2.482.950.000 el perjuicio ocasionado al ente por las maniobras referidas.