IPS: así ‘dormían’ los reposos

El gerente de Prestaciones Económicas, Dr. Pedro Halley, convocó a varios medios de comunicación hasta una vivienda ubicada sobre Alexander Fleming N° 251 casi Dr. Bestard, en el barrio Santo Domingo de la capital, donde exhibió un cúmulo de cajas de cartón con pedidos de reposo que quedaron en el olvido desde hace casi 10 años. 

La casa, que actualmente hace de sede del Banco de Tejidos, se constituyó en un verdadero “cementerio” de solicitudes de trabajadores cuyos pagos quedaron pendientes. El funcionario evitó entrar en detalles sobre la manera en que estas documentaciones fueron a parar al lugar.

Se trata de parte del “lote” de 55.000 expedientes de reposo que quedaron acumulados entre los años 2008 y 2014. “Quiere decir que son de administraciones anteriores a la gestión de Benigno López”, aclaró para deslindar responsabilidad sobre el actual presidente del Instituto de Previsión Social. Comentó que se trata de pedidos que nunca fueron procesados, por lo que los interesados jamás pudieron cobrar. “Son reposos que no se procesaban, se dejaban de lado o se guardaban”, manifestó en rueda de prensa.

Los documentos estaban abandonados en una pieza trasera de una vivienda cercana al Hospital Central. “Acá en el patio trasero de una casa abrimos una habitación hace un par de meses, cuando asumimos esta gestión, y encontramos este archivo”, explicó. El funcionario aseguró que el cúmulo era inclusive más desordenado en comparacion al aspecto que presenta actualmente. “Esto forma parte de la cantidad de reposos pendientes de tramitación; reordenamos por lo menos por año y estamos poniéndonos al día”, manifestó.

Halley señaló que ante este panorama se inició un trabajo de reordenamiento “que no es fácil”. “Son 7 años de expediente acumulado; si hubieran visto lo que esto era cuando abrimos esta puerta, era una cuestión que daba vergüenza”, manifestó. El funcionario evitó ahondar en eventuales responsabilidades sobre esta situación y se limitó a recordar que hay un sumario en curso. “No quiero decir que vinieron a esconder acá, sino que hubo falta de procesos; serán los auditores los que nos dirán si hay responsabilidad”, manifestó al ser abordado sobre una eventual intencionalidad de cajonear estos expedientes.

Pedro Halley garantizó que todo este cúmulo de pedidos de reposos serán regularizados en un periodo de 30 días. “Acá se está ordenando por año la documentación atrasada y ahora estamos en un proceso de liquidar los pendientes, dejar en cero. Para fines de setiembre vamos a tener ya cero atrasos”, indicó. Garantizó, asimismo, que los pedidos de pagos que se ingresen a partir de ahora ya se cobrarán en un periodo máximo de 30 días.

“El proceso de una persona que hoy solicita reposo ya tiene (el pago) en 30 días”, aseguró. Posteriormente, garantizó que los desembolsos se acelerarán aún más en los siguientes meses. “La ley nos obliga a hacer el pago en siete días y vamos a llegar a esos 7 días antes de fin de año”, manifestó. Halley adelantó que inclusive se apunta a la posibilidad de que los reposos sean acreditados directamente a la cuenta bancaria donde el trabajador percibe su salario mensualmente. Actualmente se expiden cheques para ser cobrados en el Banco Nacional de Fomento (BNF).

Sobre otro punto, el funcionario mencionó que el sistema anterior era tan burocrático que muchos reposos ya debían ser cobrados pero los interesados nunca se presentaron, aparentemente ya cansados de la larga espera. “Tenemos G. 13.000 millones en el BNF pendientes de pago y son 10.000 personas que no cobraron porque a lo mejor ni se enteraron”, lamentó.