Ni el acceso al agua potable está garantizado

Cristina Muñoz, titular del Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Erssan) se refirió a un problema que persiste a estas alturas: la insuficiente cobertura de la Essap, que solo abastece a Asunción y algunos puntos del departamento Central. Según detalló, la aguatera estatal maneja el 30% del servicio de provisión de agua corriente. “El 40% las cubren las juntas de saneamiento y el 10%, las aguateras privadas. El resto son comisiones de agua, cooperativas o municipios”, refirió.

La funcionaria fue más allá y señaló que solo el 64% de la población paraguaya accede al agua corriente, pero ello no significa que se trate de líquido potable, según reconoció. “No podemos decir que sea agua potable, por eso controlamos”, refirió. Con respecto a que al menos se pueda asegurar que el producto sea “tratado”, Muñoz comentó que del 64%, este grupo representa el 58%. “El resto ni tenemos informes laboratoriales; puede que esté tratada como que no esté”, detalló.

Comentó que en todo el país existen más de 3.000 aguateras, varias de las cuales operan inclusive en zonas próximas al área metropolitana, como el caso de Limpio, donde las quejas de los usuarios son constantes por la mala calidad del servicio. Muñoz indicó que la Essap está autorizada a operar en estas localidades donde las firmas privadas no pueden garantizar el servicio. Sin embargo, la empresa estatal tampoco está capacitada para expandirse al ritmo requerido. “No puede cubrir siquiera todo Limpio, no le da su sistema”, sostuvo.

Aclaró que la Essap tiene previsto construir una planta en Limpio, a fin de intentar hacer frente al problema persistente y abastecer a la mayor parte de la localidad. “Ya se terminó el proyecto y creo que en estos días sale la licitación”, anunció.

La titular de Erssan igualmente se refirió a un problema que ya había sido señalado a principios de año por el titular de la Essap, Ludovico Sarubbi: la progresiva salinización del agua en Limpio y otros puntos por la cercanía al Chaco.

Los pozos de la localidad no dan abasto en la localidad ante la gran demanda y el problema se agrava debido a que en los mismos el “sabor a sal” va en progresivo aumento.

La única solución sería la planta proyectada por la aguatera estatal, según reafirmó la funcionaria. De esta manera, la Essap tomaría agua directamente del río para posteriormente potabilizarla y redistribuirla.