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La dueña de la vivienda, María Elena Báez, presume que la intención de los atacantes era crear un especie de pequeña humareda a fin de que ella abriera la puerta de su casa y acudiera a verificar lo que pasaba, para así ingresar a la casa y asaltarla, según informó el periodista Víctor Ruiz.
El intento no resultó según lo esperado, debido a que el fuego y el humo fueron más intensos de lo debido y los vecinos se percataron del incidente antes que María Elena. La mujer señaló que ella reside desde hace 30 años en el lugar, al igual que su hijo, dueño de los dos coches; y que no tienen enemigos en la zona.
Vecinos lograron sofocar el fuego, que alcanzó un sillón y papeles que se encontraban en el garaje. En tanto, bomberos voluntarios realizaron las tareas de enfriamiento. En la vereda fue abandonada una botella que contenía en su interior nafta súper, que los piromaniacos no llegaron a usar.