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El tribunal de sentencia, presidido por la jueza Mesalina Fernández, rechazó el pedido de la defensora pública, Sandra Rodríguez, quien había solicitado un mes de tiempo para interiorizarse del expediente que todavía no pudo leer debido a que su cliente no tenía dinero para hacer las fotocopias. Mariano Escurra está acusado de haber sido uno de los 13 exdirectivos de Cajubi que desviaron US$ 42 millones, dinero que fue llevado al exterior, donde se perdió, razón por la cual ahora está siendo procesado.
Con el rechazo del aplazamiento del juicio, inició las diligencias con respecto a los 12 acusados, ya que por cuestiones de salud fue separado de este juzgamiento Aurelio Sosa, quien enfrentará juicio de forma separada. Sosa necesita de un cambio completo de su marcapasos y podría llevar meses su recuperación, por ende se lo apartó.
Los fiscales Victoria Acuña y Aldo Cantero y los abogados querellantes Rafael Fernández y Gustavo Gorostiaga, pidieron al tribunal la inclusión de documentos probatorios, entre ellos el balance de la Cajubi de los periodos 2010 al 2015 y que estos documentos sean auditados por un perito contable que brinde al tribunal un dictamen para que los mismos puedan apreciar con mayor claridad lo que pasó en la Caja de Jubilados de la Itaipú Binacional. Para la elaboración del dictamen solicitaron que jure el perito contable Carlos Jara.
Los trece procesados que fueron citados para el juicio oral son Víctor Daniel Bogado Núñez, Félix Juan Bautista Villamayor, José Salvador Alonso Martínez, José Szwako, Cíbar Enrique Insfrán, Ricardo Antonio Pereira Poletti, Édgar Rolando Mengual Herken, César Amílcar Bejarano Filippi, Pabla Mieres de Scavenius, Gustavo Duré, Walter Elías Delgado y Mariano Escurra.
Según los antecedentes, los acusados, entonces directivos de la Cajubi, decidieron invertir la suma de 5 millones de euros en una empresa llamada Spot Forex para operaciones financieras de alto riesgo. Con el argumento de que con la inversión se triplicarían las ganancias, los responsables vaciaron la caja e hicieron desaparecer los 40 millones de dólares.
De esa forma se concretó una escandalosa millonaria tragada que causó un enorme perjuicio a los jubilados. El tribunal de sentencia integrado por las juezas Mesalina Fernández, Rosarito Montanía y María Esther Fleitas.