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La medida, que en un principio iba a limitarse a la toma del colegio y escuela que funcionan en el mismo predio, se endureció desde las primeras horas de la mañana, cuando los padres de familia decidieron cerrar la ruta.
Los bloqueos duran 30 minutos, tras los cuales permiten el paso durante 10 minutos.
“En Paraguay es la única manera de conseguir lo que se reclama”, justificó José Román, padre de familia del citado lugar.
Según los datos, tres rubros que eran de la escuela desaparecieron durante las vacaciones, mientras que en el colegio necesitan 90 horas cátedra para completar el cuadro docente. “Por de pronto, los padres de familia vienen solventando los rubros faltantes con aportes voluntarios”, explicó el profesor Edismar Dos Santos, director.
Entretanto, en la escuela “José Asunción Flores”, de la colonia Canindeyú, unos 50 padres de familia continúan en el interior de la institución, evitando que profesores y alumnos ingresen al predio. La toma de la escuela es por la misma causa: falta de rubros docentes y creación del octavo y noveno grados.
Tanto el km 5 como la colonia Canindeyú sufren una superpoblación de alumnos debido a la tasa de crecimiento poblacional. Las dos comunidades se convirtieron en los últimos tiempos en el lugar predilecto de gente nueva que llega a la ciudad, debido a la gran cantidad de loteamientos abiertos. Cada zona cuenta con al menos diez nuevas poblaciones en propiedades privadas. En km 5, la SAS creó dos nuevos barrios, con al menos 170 familias cada uno.
Los padres de familia aseguran que solo exigen lo básicamente necesario para el funcionamiento de las escuelas y colegios de la ciudad, que en general están superpoblados, con un promedio de 45 a 50 alumnos por aula.