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El “gatillo fácil” Ramón Bernal Gamarra (28) siguió con su largo recorrido que empezó ayer en Carayaó. En la mañana de este sábado, policías llevaron al uniformado a la cárcel de Tacumbú para el cumplimiento de prisión preventiva, por orden de una jueza de Coronel Oviedo.
La sorpresa fue grande, porque el director de la cárcel de Tacumbú, el abogado Artemio Vera, se negó a recibir al suboficial. El imputado por homicidio fue llevado a la sede de Judiciales de la Policía, donde aguardará el destino que tendrá en las siguientes horas.
Artemio Vera explicó a ABC Color que recientemente la organización Mecanismo Nacional de Prevención de Torturas recomendó que ningún procesado ingrese más a la cárcel de Tacumbú, porque hay una superpoblación en el lugar.
Vera indicó que es un contrasentido que, existiendo una cárcel en Coronel Oviedo, con suficiente espacio, la jueza haya ordenado la reclusión en Tacumbú.
Precisó que si la seguridad no es la adecuada en la prisión de Coronel Oviedo, el suboficial podía ser derivado a la cárcel de Villarrica, que queda solo a 40 kilómetros de la capital del departamento de Caaguazú.
Aclaró que pese al hacinamiento, la cárcel de Tacumbú puede recibir a procesados del Chaco, Asunción, Central, Cordillera y Paraguarí, pero ya no a imputados de otras regiones.
Manifestó que existen aproximadamente 4.000 reclusos en la cárcel de Tacumbú, de los cuales 40 son policías, por lo cual iba a ser difícil garantizar la seguridad del suboficial Bernal. Adelantó que enviará una nota al juzgado de Coronel Oviedo el lunes, para justificar su decisión.
El suboficial Bernal Gamarra asesinó al joven Atilio Recalde Filártiga (21), en la madrugada del 26 de setiembre pasado, en una bodega de Coronel Oviedo. El caso solo tomó relevancia para los investigadores cuando el hecho trascendió mediante un video en las redes sociales.