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La Unión de Organizaciones de ciudadanos y ciudadanas de Ñeembucú (UOCÑ) emitió un comunicado donde rechazó las declaraciones del presidente Horacio Cartes acerca de la posibilidad de convertir el agua que inunda hoy en agua útil para reservorio de arrozales. La nota de la UOCÑ fue firmada por los miembros de la organización encabezada por Pablino Cáceres.
Por su parte Mauricio Acosta, vocero de prensa de la UOCÑ expuso algunas consideraciones acerca de los humedales del Ñeembucú. Acosta puntualiza que la sobrevivencia de las comunidades ribereñas dependen del ecosistema. “Los humedales generan un ambiente propicio al desarrollo de los peces, y el sustento económico de casi cuatro mil familias del departamento de Ñeembucú”, señala la nota.
Agrega que los humedales son frágiles y sensibles a cualquier alteración y el empleo de agrotóxicos que se incorporan rápidamente a los cursos de agua, en la capa freática y en la superficie.
Los humedales proveen de numerosas plantas alimenticias y medicinales, mediante su flora libre de químicos permiten miel de abeja ecológica apreciada a nivel nacional e internacional, y generación ingresos económicos para los pequeños productores del departamento, agrega el miembro de la UOCÑ.
Señala que los cambios pueden impactar fuertemente en los servicios ecosistémicos que los humdales brindan a la población en general y que son principalmente el medio de vida de las familias más humildes del departamento de Ñeembucú.
Acosta menciona esos servicios ecosistémicos a la caza, pesca y leña para la subsistencia, además del importante papel en el mantenimiento de la calidad del agua para uso productivo recreacional.
Ñeembucú tiene condiciones para incursionar en la producción frutihortícola, fortalecer la producción de miel de abeja, de rubros de autoconsumo y de renta como maíz, poroto, mandioca, batata, sésamo, sandias y melón, expresa Mauricio Acosta.