Temen que nuevo párroco no continúe obra de padre anterior

CIUDAD DEL ESTE. Feligreses temen que el nuevo párroco, Darío Britos, no dé continuidad a los trabajos que venía realizando el sacerdote saliente, Kevin Lieberman, de la Comunidad Sacerdotes de San Juan, en la iglesia Espíritu Santo, del área 4.

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Allí, en los últimos cinco años se pintaron espectaculares murales, declarados Patrimonio Cultural Nacional, además de realizarse conciertos sacros con acompañamiento de maestros como Luis Szarán.

El cambio de párroco en la parroquia Espíritu Santo se realizó el domingo en una ceremonia que estuvo presidida por el monseñor Guillermo Stecking, quien explicó a la feligresía que creyó conveniente el cambio, sin dejar de lado el rico carisma de la Comunidad San Juan y aclarando que el seminario y el colegio que funcionan en el lugar, seguirán coexistiendo junto con el trabajo de los presbíteros de esa comunidad y el trabajo pastoral del nuevo párroco.

Sin embargo, los feligreses manifiestan preocupación. La coordinadora del Consejo Pastoral Parroquial, Lidia Benítez, y la integrante del Consejo Económico, María Fariña, explicaron que “hay temor de que no se continúen los cambios que había comenzado el padre Kevin y que haya un retroceso. Deseamos que haya crecimiento en las actividades culturales, en el acercamiento con la feligresía, en la solemnidad litúrgica, que se estaba llevando a cabo cuando ocurrió este cambio inesperado”.

“En el 2010 entró la Comunidad San Juan a la parroquia. Fruto de evangelizadores de la paz y la alegría, los bautismos, las confirmaciones, los casamientos aumentaron. En el 2010 hubo 125 confesiones semanales y en el 2015 se llegó a 601 confesiones semanales”, dijo Benítez.

“La solemnidad litúrgica, el respeto que se debe tener a la eucaristía, la disponibilidad en un cien por ciento para atender a todos los feligreses, fueron características que, tenemos fe en la palabra del obispo, se mantendrán”, añadió la coordinadora del Consejo Pastoral.

María Fariña explicó que económicamente también hubo crecimiento en la parroquia, producto de un convenio de uso y préstamo con condiciones económicas muy ventajosas, que se realizó con el Centro Educativo San Esteban, de inversión privada. Los activos, que eran de unos Gs. 138 millones en el 2010, ahora superan los Gs. 1.884 millones, informó.

En la parroquia también funciona el seminario mayor, Instituto San Ireneo de Lyon, y los feligreses desean que los seminaristas se mantengan y puedan seguir enriqueciendo las liturgias con sus conocimientos, señalaron las entrevistadas.

Benítez y Fariña resaltaron también que los murales de la Parroquia Espíritu Santo fueron declarados Patrimonio Cultural Nacional en el 2015, y de interés turístico por la Secretaría Nacional de Turismo. Allí, durante todo el año pasado, se realizaron permanentes conciertos de música sacra, interpretados por el Coro Espíritu Santo e incluso con acompañamiento del maestro nacional Luis Szarán.

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