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Monseñor Pedro Collar Noguera presidió este martes 31 de julio la misa concelebrada en honor al santo patrono San Ignacio de Loyola, quien fuera el fundador de la Compañía de Jesús, más conocida como la orden de los jesuitas.
La liturgia se realizó al costado del templo parroquial de San Ignacio, adonde asistieron centenares de feligreses. Antes de la misa, los fieles participaron de la procesión de la sagrada imagen por las principales calles de esta ciudad.
En su homilia, monseñor Collar Noguera resaltó la figura del protector de esta comunidad, San Ignacio de Loyola. Pidió a los jóvenes, en este Trienio de la Juventud, asumir el rol protagonista en la transformación social.
El obispo señaló que la Diócesis tiene grandes desafíos y retos en la sociedad. “La Iglesia tiene que ser casa y escuela de comunión. La familia tiene que ser formadora de la personalidad de la persona humana y cristiana”, dijo, al tiempo de exhortar a los padres de familia a escuchar, dialogar, acompañar y enseñar a sus hijos para lograr la formación integral.
“Es importante el hogar, donde los padres deben asumir sus roles de ser formadores de la persona”, enfatizó el obispo. Monseñor Collar manifestó, en otro momento, que además de la juventud, la familia y las vocaciones, la Iglesia prioriza la atención a los pobres y enfermos.
En ese sentido, hizo un llamado a los fieles a no excluir a nadie por su condición social. “Como cristianos debemos apostar por el amor fraterno, ser solidarios, escuchar y compartir con los más necesitados”, enfatizó monseñor Collar Noguera.