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El ministro de la máxima instancia judicial participó de un acto simbólico en que se colocaron centenares de zapatos rojos en la explanada del Palacio de Justicia, cada uno de los cuales simboliza a una mujer víctima de las diversas formas de violencia, ya sea física o psicológica.
Blanco señaló que la mayor parte de los actores del Poder Judicial reconocen la urgencia de reformar el funcionamiento de la justicia en el país, pero pocos enfatizan lo referente a la violencia contra la mujer, que muestra cifras alarmantes a tal punto de que superan la capacidad de los jueces, quienes al priorizar estos casos terminan desatendiendo otros.
Sin considerarse un especialista, para el ministro resulta urgente “la búsqueda de nuevos paradigmas y criterios para una nueva legislación que nos permita abordar este drama social y cultural que tenemos. Celebro el simbolismo del acto y puede que sirva para lograr los objetivos que se proponen las organizaciones que trabajan por los derechos de las mujeres”, dijo.
El ministro señaló que en los últimos tiempos han aumentado las condenas por prestación alimentaria, que se ha convertido en una muestra más de los vejámenes de que son víctimas las mujeres en nuestro país. La muestra denominada Zapatos Rojos, tiene su origen en la ciudad mexicana de Chihuahua, en el estado de Juárez, una de los más hostiles para con el sexo femenino.
Los zapatos simbolizan la marcha de 33 mujeres ausentes a las que se han ido sumando otras desde el año 2009 y propone dar visibilidad al dolor que provoca la violencia contra la mujer en las sociedades.