Cámara captó mortal arrollamiento y contradice a chofer

En el material se puede ver que la víctima se disponía a cruzar en el sitio indicado para el efecto -no señalizado-. Miró del lado contrario de la dirección de la calle Independencia Nacional, en un momento, y luego, cruza. El bus, que frena unos instantes antes, lo arrolla cuando llega casi a la mitad de la calle. El hecho ocurrió cerca de las 07:30 de hoy. Testigos indicaron que la víctima se dedicaba a la venta de gaseosas en las plazas de la zona.

Recién sobre la calle General Díaz el chofer se percata de lo sucedido y frena. Los más asustados aparentemente fueron los pasajeros, quienes descendieron rápidamente del vehículo. Este video es clave para la investigación, ya que contradice por completo la versión dada por el chofer del colectivo esta mañana. El trabajador del volante habló de que un segundo vehículo realizó una maniobra que desencadenó en el hecho.

El conductor, que  se identificó como Carlos Aguayo, relató a este medio que iba al mando del bus sobre Independencia Nacional, y al momento de girar en General Díaz, la víctima se tropezó y no le dio tiempo de reaccionar. El chofer comentó además que al momento del giro, una camioneta apareció a gran velocidad por General Díaz y que esto posiblemente asustó al peatón. “Al no saber dónde ir, terminó cayendo bajo mi rueda y no pude hacer más nada”, dijo y agregó que la camioneta no detuvo la marcha tras el fatal accidente.

Aguayo quedó a cargo del Ministerio Público, informó esta mañana el comisario Hermógenes García, jefe de la comisaria 3ª Metropolitana. A raíz de este accidente, se realizó un bloqueo en varias calles de la capital esta mañana, lo que dificultó la circulación  por varias horas. 

Las quejas acerca de la imprudencia de los choferes del transporte público son constantes, especialmente en el centro de Asunción, donde difícilmente los peatones encuentran veredas amplias y seguras; o calles debidamente señalizadas. 

Recordamos lo que dice el artículo nº 114 del Reglamento General de Tránsito de Asunción, en la subsección sexta, “De las preferencias de cruce y paso”: 

“Todo peatón o conductor de vehículo que llega a una bocacalle o encrucijada debe ajustarse a las indicaciones del agente de tránsito o a las que sean dadas por señales luminosas, sonoras o fijas. A falta de tales indicaciones, los peatones y conductores sujetarán su conducta a las normas que se indican a continuación: El peatón tiene prioridad sobre los vehículos para atravesar la calzada por la franja peatonal o, en ausencia de ésta, de esquina a esquina en la prolongación de la acera. Al aproximarse a esta franja, el conductor debe reducir la velocidad a paso de peatón. En las esquinas sin semáforos, cuando sea necesario, deberá detener por completo su vehículo para ceder espontáneamente el paso a los peatones. En todo accidente producido en dicha franja peatonal, salvo que hubiera tenido preferencia el conductor por expresas señales de tránsito o indicaciones de un agente, se presume la culpabilidad del conductor. (Su inobservancia constituye falta gravísima)”.