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Visto que los adolescentes no acuden habitualmente a los adultos para resolver algunos problemas y, por lo tanto, buscan a otros de su misma edad para encontrar alguna ayuda, dentro de la Cruz Roja se creó un departamento denominado “Juventud”.
La organización se encarga de dar cursos de capacitación a jóvenes, en varias áreas como el cuidado del ambiente, fotografía, atención de la salud, etc. Los voluntarios realizan dichas actividades sin olvidar los trabajos de carácter social, como visitar los albergues, concienciar a la gente sobre las enfermedades que transmiten los mosquitos y juntar donaciones materiales para diversos orfanatos, escuelas y hospitales.
Cada tanto, se hacen convocatorias con el fin de atraer a jóvenes que se unan a este grupo; los interesados en ingresar a la comunidad tienen que pasar por tres etapas que van formando a los nuevos miembros. Voluntario “ahijado”, “padrino” y “abuelo” son las fases que debe superar un adolescente que quiera formar parte de “Juventud”. Aquí se tocan temas referentes a los primeros auxilios, organización de charlas educativas y apoyo a la comunidad.
“Existen personas que comentan que es una pérdida de tiempo y gasto de dinero el hecho de integrar 'Juventud' de la Cruz Roja; sin embargo, en este lugar uno aprende muchas cosas que no conocería en colegios, iglesias o en la casa”, afirma Junior Ariel, director nacional de “Juventud”. El ser voluntario no te da ningún ingreso económico, pero las experiencias y la alegría que encontrarás en esta organización valen más que cualquier retribución monetaria.
El método que utilizan a la hora de planificar alguna actividad es participativo: buscan que cada proyecto sea elaborado por jóvenes y que ellos mismos resulten beneficiados con las iniciativas. Actualmente, se está implementando más el uso del arte, ya sea teatro o música, para los debates y formaciones, pues, de esta forma, los temas se pueden entender mejor.
La Cruz Roja se subdivide en tres grupos: “Socorro”, “Damas Voluntarias” y “Juventud”. Sin embargo, con un total de 21 filiales y subfiliales, solo existen 600 voluntarios en nuestro país. El único requerimiento que esta organización hace a los chicos es que tengan el espíritu del voluntariado, es decir, que busquen ayudar a las personas en lo que necesiten sin distinción ni favoritismo. La mayor parte de los integrantes que incorpora “Juventud” son adolescentes que todavía no entraron a la universidad, pues tienen más tiempo libre y todavía están con sus planes para futuro en construcción.
Un corazón joven y dispuesto a ayudar es lo que necesita nuestro país para salir adelante. Y vos, ¿te animarías a ser un voluntario más?
Por Jorge Ferreira (16 años)