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La danza es un perfecto medio para expresar un sinfín de emociones a través de las coreografías, mientras que el teatro puede atraparte con las actuaciones más deslumbrantes. Una vez que se abre el telón, los artistas demuestran su talento, producto de jornadas cargadas de sacrificio y mucha práctica. Macarena sabe esto con certeza, ya que se dedica a la enseñanza en varias academias del país, pero esto es apenas el comienzo de sus logros, que incluyen haber ganado el Nacional de Danza (2013), actuar en una película y enseñar jazz en un congreso de Argentina.
Su pasión por la danza comenzó en su infancia: “Solía jugar a realizar shows, era como una necesidad de explorar en el arte, ya que me hacía feliz. Cuando fui creciendo, el baile se convirtió en mi refugio y ahora, como docente, se transformó en mi vida, ya que lo veo como una herramienta de cambio”, afirma la profe Maca, quien actualmente enseña expresión corporal en la escuela de teatro “El Estudio”, danza en las academias “Laura Carles”, “Ñasaindy” y otros institutos.
El mayor logro de la profe Macarena en la actualidad es haber sido la primera docente paraguaya en dictar un curso de Broadway Jazz en el Congreso de Musicales de la conocida cantante Valeria Lynch, en la ciudad de Buenos Aires, durante el mes de octubre. Muchos artistas locales fueron becados para participar en los talleres artísticos pero es la primera vez que una compatriota integra el equipo de profesionales que impartieron clases.
El teatro es su otra pasión que la llevó a participar en la cinta nacional “Santificar lo profano”, que tuvo como principal escenario el barrio Chacarita de Asunción. “Mi afición comenzó no hace mucho porque quería experimentar lo que es ser una artista completa. Amo el teatro al igual que la danza, ya que ambos se complementan; creo que la actuación tiene la capacidad de analizar y construir un personaje desde otras perspectivas completamente diferentes”, afirma Macarena.
La joven profesora exhibió su talento en los mejores escenarios del mundo, recorriendo países como Estados Unidos, Brasil y Argentina. Ella insta a los amantes del teatro y la danza a que se animen a explotar el potencial que tienen. “El arte tiene la capacidad de hacernos mejores personas y nos conecta con los demás. Me encantaría que los jóvenes tengan el valor de creer en sus sueños, ya que, con amor y trabajo es imposible fallar”, finaliza.
Por Víctor Martínez (18 años)