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Un nuevo concepto inmobiliario desembarca en San Lorenzo, específicamente en la zona de Pinedo Shopping, sobre la avenida Laguna Grande.
Moravia se llamará el condominio, cuyas obras se iniciaron hace una semana y que mezcla viviendas tipo dúplex con edificios de departamentos en un mismo predio. Con un desembolso que ronda los 24 millones de dólares, la Inmobiliaria Hispano Paraguaya (IHP) pretende construir 210 viviendas en cuatro etapas. La primera busca tener listas 62 viviendas en 18 meses.
El condominio tendrá un total de 28.000 m2 construidos, que incluirá también un área comercial con dos oficinas bancarias y algunas tiendas.
Méndez del Pozo, de Barcelona, es la oficina que diseñó el barrio cerrado, que tendrá 10 viviendas tipo dúplex y otros edificios de entre 4 y 5 plantas, siendo el más alto la única torre de 9 plantas.
“Pensamos en este diseño para dar frescura, mucho aire y lugar para la entrada de la luz al condominio, donde todos miran hacia adentro”, comentó Rafael Plañiol Lacalle, presidente de IHP. Adentro estará el jardín interno con la piscina, el quincho y un gimnasio. El 60% del predio será destinado a zonas verdes y el estacionamiento estará ubicado en un espacio semisubterráneo.
Este desarrollo inmobiliario fue pensado en las nuevas estructuras familiares, que no siempre requieren de una vivienda de muchas habitaciones para vivir, ya que eso siempre encarece la propiedad. En este caso, Moravia ofrecerá el 50% de las viviendas de tres habitaciones, 35% de dos habitaciones y el 15% de una habitación. Algunas tendrán cuarto de servicios y otras no.
Las viviendas de un dormitorio tendrán 75 m2 propios, y las de tres dormitorios llegan hasta 150 m2. En tanto que los precios oscilan entre 85.000 dólares, los más económicos, y 160.000 dólares, los más caros.
Jorge Figueredo, de Inmobiliaria Raíces, empresa encargada de la comercialización de las viviendas, destacó la relación costo-beneficio de este emprendimiento, que será construido por la empresa Construsil S.A.
La firma cuenta con un plan de financiación propia, que consiste en una entrega del 5% y el resto en 24 cuotas o hasta la entrega de la vivienda. A partir de allí, y mediante una alianza con BBVA, la deuda luego se traspasa al banco de capital español.