Cargando...
“Como Yacyretá ya tiene varios errores y problemas, sumarle Aña Cua sería agrandar la bolsa de dilemas a solucionar”, añadió.
El técnico considera que el proyecto es irreversible por el nivel de avance que alcanzó y que el próximo gobierno debería ocuparse de sacar más ventajas del mismo para nuestro país.
La construcción de la nueva usina en el Aña Cua es un proyecto muy polémico, porque no está siquiera previsto en el Tratado. El proyecto no fue aprobado por el Congreso Paraguayo y un grupo de senadores impulsa la interpelación al canciller Eladio Loizaga por lo que consideran la violación del documento bilateral, en detrimento de los intereses paraguayos.
Encina también dijo que los más beneficiados con la obra serán los contratistas.
En tal sentido, los legisladores Miguel Abdón Saguier y Miguel Ángel López Perito habían denunciado en su momento que el gobierno de Mauricio Macri impulsaba la construcción de la nueva central para “salvar” de la quiebra a la empresa argentina Pescarmona.
Otro de los cuestionamientos se relaciona con el costo estimado de la nueva central, que hoy ronda los US$ 600 millones, pese a que dos décadas atrás lo estimaban en tan solo US$ 240 millones, que serán asumidos por la binacional y trasladados a sus usuarios, paraguayos o argentinos, a través de sus tarifas.
La nueva usina sumará una potencia adicional de solo 270 megavatios.