Arlan, con más días en cautiverio que Lindstron

El adolescente Arlan Fick Bremm fue secuestrado en la noche del 2 de abril pasado, hace 47 días, de su casa de la colonia Paso Tuyá del distrito de concepcionero de Azote’y. Fue después de un tiroteo en el que murieron el vicesargento 1° de Material Bélico del Ejército Hugo Andrés Monges Ramírez (21) y los criminales del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), Bernardo Bernal Maíz (20), alias “Coco”, y Claudelino Silva Cáceres (22), alias “Víctor”.

Esa misma noche, en plena huida con el menor como rehén, los delincuentes ejecutaron de tres tiros en la cabeza al peón de la estancia “Casa Blanca” de Paso Tuyá, Ysaax Arce (37), después de que lo encontraran casualmente en el monte, donde el trabajador –cuyo hijo tenía un mes– estaba de cacería.

En un comunicado enviado por correo electrónico al Canal 9, supuestamente por miembros del EPP, el grupo confirmó que tenían retenido al menor y después hicieron llegar a la familia unos CD con un video que debía ser entregado a periodistas, además de un comunicado en el que exigían 50.000 dólares en víveres para las comunidades de Kurusu de Hierro y Arroyito, a cambio de la liberación de Arlan.

Sin embargo, pese a que la familia del joven cumplió con todas las exigencias, la liberación siguió dilatándose, por lo que empezaron a correr los rumores más pesimistas.

Sin sensibilidad

Pese a las multitudinarias marchas que se hicieron en casi todos los rincones del país, en repudio al EPP, el grupo criminal no se sensibilizó ni siquiera en el Día de la Madre, cuando se aguardaba que Arlan regresara a su casa.

Asimismo, en los últimos días surgieron reiterados rumores de liberación, que después fueron descartados por los organismos de seguridad, aunque hasta ahora se busca determinar si fueron propagados por los mismos elementos de la banda, en el marco de una práctica de distracción y para medir la reacción de los uniformados.

De momento, el secuestro de Arlan Fick ya superó la cantidad de días que permaneció en cautiverio Luis Alberto Lindstron, aunque está cerca de la marca de María Edith Bordón de Debernardi y casi a la mitad del caso Fidel Zavala Serrati.

El único de los secuestros materializados por la banda criminal que tuvo un trágico desenlace fue el de Cecilia Cubas Gusinky, quien fue hallada muerta 148 días después de su rapto en una vivienda del barrio Mbocayaty de la ciudad de Ñemby.

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