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En las comunidades habitan laboriosos campesinos que se dedican a la variada producción agrícola, como mandioca, batata, maní, maíz y hortalizas. En días de lluvia quedaban aislados y los productos se perdían.
La pasarela de madera tiene aproximadamente 13 metros y la base es de hormigón armado, según datos de la Municipalidad.
Este camino ya no se podía transitar en vehículos, sino solamente en motocicletas y con mucha dificultad debido a la falta de un puente. “Era toda una odisea para nosotros salir hacia la ciudad de Curuguaty o regresar a Yasy Cañy. Ahora ya no tenemos problemas; a pesar de que el camino es de tierra, ya es transitable, indicó el poblador Ramón Giménez.
El labriego resaltó que tuvieron que dejar de utilizar durante dos años la vía debido a la falta de este paso y recurrían a una vía más larga, que quedaba intransitable luego de cada lluvia. Con la apertura de las mejoras ya podrán trasladar sin inconvenientes sus productos a los mercados.
El intendente Blásido Villalba explicó que la obra demandó una inversión de G. 183 millones. Añadió que se llevó a cabo en una zona que era de muy difícil acceso, justamente debido a la falta de puente, pero que ahora los habitantes ya pueden circular por el camino sin problemas ni temor a quedar varados.