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Durante el encuentro, celebrado el martes y que marcó la primera visita de un miembro del Gobierno neerlandés a China en más de tres años, debido a las restricciones de viaje impuestas por la pandemia de covid-19, ambos cancilleres expresaron su disposición a fortalecer la cooperación económica, comercial y de inversión, informó hoy la agencia oficial de noticias Xinhua.
Asimismo, acordaron trabajar en conjunto en temas multilaterales relacionados con el control de armas, la seguridad cibernética y el cambio climático.
China reafirmó su compromiso de ampliar el acceso al mercado y proteger los derechos de propiedad intelectual, al tiempo que expresó su deseo de contar con un entorno comercial justo, abierto y no discriminatorio para las empresas chinas en los Países Bajos.
Por su parte, los Países Bajos reiteraron su adhesión a la política de ‘una sola China’ y manifestaron su intención de fortalecer la cooperación en campos como agricultura, innovación y otras áreas de interés mutuo.
Ambas partes acordaron también trabajar conjuntamente para oponerse al desacoplamiento y al corte de las cadenas de suministro, reconociendo la importancia de mantener una cooperación sólida y estable en el ámbito económico.
Durante la reunión, también se abordaron diversos temas internacionales y regionales de interés común, entre los que destacó la guerra en Ucrania.
El país europeo, según Xinhua, valora los esfuerzos de China para promover las conversaciones de paz y su ministro confió en que Pekín desempeñe un papel constructivo en la solución pacífica del conflicto.
La reunión tuvo lugar en un contexto en el que los Países Bajos han denunciado interferencias chinas, incluyendo la presencia de supuestas "comisarías policiales ilegales" y restricciones a la exportación de máquinas de microchips de la empresa ASML a China.
Estas restricciones se han implementado con el objetivo de evitar que los microchips se utilicen con fines militares no deseados, lo que ha generado críticas por parte de China, que se opone a estas limitaciones a las exportaciones.
Durante una comparecencia posterior a la reunión, Qin reaccionó “irritado” ante una pregunta sobre los informes de los servicios de inteligencia neerlandeses sobre espionaje económico por parte de China, señaló la televisión pública neerlandesa NOS
Según Qin, los informes de inteligencia son "exagerados" por los medios de comunicación, lo que puede "envenenar" la relación entre los dos países: “China es un socio y no una amenaza”, enfatizó.
El ministro chino, además, cursó a través de Hoekstra una invitación formal al primer ministro neerlandés, Mark Rutte, para que visite China en los próximos meses.