"Pido a la autoridad, encabezada por el presidente de la República, Abdelfatah al Sisi, que asuma su responsabilidad ante estas prácticas y desvíos", escribió Tantawy en su cuenta de X (antes Twitter), en referencia a las acusaciones lanzadas el pasado viernes contra Menéndez y su esposa, Nadine Menéndez, por la Fiscalía federal para el Distrito sur de Nueva York.
Según la Fiscalía, los sobornos que recibió la familia Menéndez desde al menos 2018 hasta 2022 fueron dinero en efectivo, oro, pagos de hipotecas, un trabajo en el que se exigía una presencia casi nula para Nadine y un vehículo Mercedes-Benz, todo ello a cambio de proporcionar información confidencial del Gobierno de los Estados Unidos a funcionarios egipcios y tomar medidas para ayudar en secreto al Gobierno de Egipto.
El candidato a la presidencia egipcia afirmó que estas acusaciones son "una profunda desgracia" para las instituciones del Estado por la "implicación de algunos de sus altos responsables de forma repetitiva" en incidentes "polémicos" que "perjudican la fama de Egipto y su imagen a nivel internacional".
Tantawy consideró todavía más "lamentable" que estas acusaciones están relacionadas con el pago de sobornos muy elevados, que se estiman por millones de dólares, en un momento en que el país atraviesa "una crisis económica moledora".
"La autoridad optó por dirigir los recursos de los egipcios no hacia afrontar la crisis y la mejora de las condiciones de vida del pueblo, sino hacia alcanzar su propio interés y el de sus altos responsables", apuntó.
Asimismo, señaló que mientras el implicado estadounidense está rindiendo cuentas en su país, las autoridades egipcias "permanecieron en silencio desde 2018 sobre estas prácticas sospechosas".
En esta línea, indicó que medios egipcios independientes como Mada Masr revelaron las sospechas sobre la decisión del Ministerio egipcio de Agricultura de otorgar los certificados de las carnes halal importadas a una sola empresa en Estados Unidos.
"Más adelante se mostró que (esta empresa) también jugaba un papel de fachada para responsables egipcios que sobornaban a un senador estadounidense (Bob Menéndez), que utilizó su poder para presionar el Departamento de Agricultura de los EE.UU. para que aprobara el monopolio de esta empresa", remarcó Tantawy.
Según el político, estas prácticas y la falta de rendimiento de cuentas es "un grave precedente que rodea el Estado egipcio" y "sus instituciones" y afecta al "prestigio internacional y la confianza del pueblo en su capacidad de proteger el interés público y hacer frente a los desvíos personales".