Bruselas publicó hoy sus evaluaciones de los planes presupuestarios de todos los socios de la eurozona y considera que sólo aprueban con nota siete de los veinte que comparten la moneda única: Chipre, Estonia, Grecia, Irlanda, Lituania, Eslovenia y España.
Entre las grandes economías del euro, Francia es la que más se desvía de las recomendaciones de la Comisión Europea, ya que su presupuesto no respeta el límite de un 2,3 % de aumento del gasto primario neto (sin tener en cuenta el pago de intereses, prestaciones por desempleo o fondos europeos) ni prevé retirar lo antes posible en 2023 y 2024 las medidas que se adoptaron por los altos precios energéticos, como había pedido Bruselas.
El Ejecutivo comunitario considera por ello que existe el riesgo de que el proyecto presupuestario de París no esté en línea con sus recomendaciones y le pide que "tome las medidas necesarias" para asegurar que su política fiscal del año próximo se ciñe a las mismas.
Bruselas recuerda que el déficit público francés se situará en el 4,4 % del PIB y la deuda pública en el 109,7 % en 2024, en ambos casos por encima de los umbrales del 3 % y 60 % del PIB que fijan, respectivamente, las normas europeas.
En la misma situación que Francia se encuentran Bélgica, Croacia y Finlandia, a los que Bruselas pide corregir sus cuentas del próximo año.
Por otro lado, los servicios económicos del Ejecutivo comunitario consideran que los proyectos presupuestarios de otros nueve socios cumplen pero no "totalmente" con las recomendaciones que emitió en primavera para cada uno de ellos: Austria, Alemania, Italia, Letonia, Luxemburgo, Malta, Países Bajos, Portugal y Eslovaquia.
En concreto, la Comisión Europea pide a Alemania, principal motor económico de la zona euro, que retire "lo antes posible" las medidas de apoyo a hogares y empresas en el marco de la crisis energética, la misma recomendación que manda a Portugal y a Malta.
Con respecto a Italia, Bruselas insta al Gobierno liderado por Giorgia Meloni a que esté "preparado" para adoptar las medidas necesarias si detecta que, en el transcurso del próximo ejercicio, la ejecución presupuestaria se aleja del comportamiento recomendado desde la capital europea.
Apertura de expedientes por déficit
El año 2024 supondrá la vuelta de las reglas que limitan el déficit y la deuda de los Estados miembros y, con ellas, la posible apertura de expedientes a aquellos que superen los umbrales del 3 % y 60 % del PIB que marca, respectivamente, el Pacto de Estabilidad.
"La Comisión ya ha aclarado que recomendará la apertura de procedimientos por déficit excesivo en la primavera de 2024", enfatizó en una rueda de prensa el vicepresidente económico del Ejecutivo comunitario, Valdis Dombrovskis.
En concreto, los países que corren el riesgo de estar sometidos a esta vigilancia fiscal a partir del año que viene por superar el techo de déficit son Francia, Italia, España, Bélgica, Letonia, Malta, Eslovenia, Eslovaquia y Finlandia, según precisaron fuentes comunitarias.