El CAC-40 comenzó casi en equilibrio con respecto a los 7.635,75 puntos del cierre del lunes, pero al cabo de unos minutos cayó ligeramente por debajo del umbral de los 7.600 puntos.
El indicador marcó una pequeña inflexión y poco antes de mediodía se situó en territorio positivo de forma que a primera hora de la tarde alcanzó el que sería el techo del día con 7.654,58 puntos.
Sin embargo, con el inicio de los intercambios en Nueva York, el CAC de nuevo se orientó a los números rojos y llegó a un mínimo de 7.547,12 puntos.
En los últimos momentos de la jornada, el descenso se moderó ligeramente y, en un día de actividad media en que se negociaron títulos por valor de 3.682 millones de euros, el índice terminó en 7.574,07 puntos.
Eso significa que en una semana el mercado francés ha perdido un 0,54 % de su valor, en un mes un 1,10 % y en seis meses un 6,98 %.
Desde comienzos de año, en cualquier caso, el CAC-40 se ha apreciado un mínimo 0,26 %.
En el frente de los valores, los grandes perdedores del selectivo fueron las grandes empresas del sector del lujo, empezando por LVMH, que descendió un 3,56 %.
También sufrieron retrocesos significativos en ese sector Kering (2,86 %), Hermès (2,67 %) y L'Oréal (2,60 %).
Igualmente experimentó una importante baja Renault (3,18 %), siguiendo con el descalabro que vivió la industria automovilística la víspera.
En el otro extremo, el sistema de pagos Edenred se apreció un 3,50 %, la compañía de electrónica para la aeronáutica y la defensa Thales un 2,53 % y la petrolera TotalEnergies un 1,38 %.