La decisión se ha adoptado en la reunión del Comité Ministerial Conjunto de Supervisión (JMMC) de la OPEP+ (OPEP y aliados) celebrada este miércoles de forma telemática, que terminó sin que sus miembros propusieran modificación alguna de las medidas vigentes.
Entre ellas destaca un aumento de 180.000 barriles diarios en diciembre a cargo de ocho de los 22 países integrantes de la alianza.
No obstante, el JMMC, presidido por el ministro saudí de Energía, Abdelaziz bin Salmán, y el viceprimer ministro ruso, Alexandr Novak, advirtió de que en cualquier momento puede convocar una reunión extraordinaria para reajustar los niveles de producción si lo considera necesario.
"El Comité evaluará continuamente las condiciones del mercado", señala la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) en un comunicado.
En su última teleconferencia, a principios de agosto, el JMMC dio luz verde al plan adoptado en junio para levantar paulatinamente las reducciones voluntarias de crudo de ocho países a partir del 1 de octubre.
Pero un mes después, el 5 de septiembre, se anunció el aplazamiento por dos meses de la puesta en marcha del plan.
El retraso fue decidido por Arabia Saudí, Rusia, Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Kazajistán, Argelia y Omán, los países que tienen previsto abrir los grifos para devolver al mercado un total de 2,2 millones de barriles diarios de crudo (mbd) de forma gradual, a razón de 180.000 barriles por mes.
El volumen total corresponde a las reducciones del bombeo que aplican de forma voluntaria y adicional a los fuertes recortes (por un total de 3,66 mbd) pactados por el conjunto la OPEP+ en diversas etapas desde finales de 2022 y que estarán vigentes hasta fines de 2025.
Fuera de este acuerdo están los socios de la OPEP Venezuela, Irán y Libia, pues debido a que sus industrias petrolíferas están ya lastradas por sanciones y conflictos han quedado exentos del compromiso de limitar sus extracciones.
Esta sesión del comité interno se convocó cuando la principal preocupación en los mercados petroleros era aún la ralentización del consumo de crudo en China, que venía presionando a la baja sobre los precios del 'oro negro'.
Pero su celebración ha tenido lugar en medio de la fuerte escalada de tensiones en Oriente Medio, horas después del ataque masivo con misiles de Irán a Israel, y cuando este país ha dicho que contraatacará en represalia.
Los precios del petróleo han reaccionado revirtiendo la sostenida tendencia a la baja de los últimos tres meses, y subían con fuerza desde ayer, debido a los temores a que el recrudecimiento de las hostilidades acabe afectando a los importantes suministros petroleros de la región.
El barril del crudo Brent, que había perdido el nivel de los 70 dólares antes del ataque iraní, avanzaba en torno al 3 % y se acercaba a los 76 dólares hacia el mediodía de este miércoles, al tiempo que el del petróleo intermedio de Texas (WTI) rondaba los 72 dólares, con un encarecimiento similar.
Ante la incertidumbre de la situación, el JMMC se limitó hoy a dejar las cosas como están, destacando la importancia de que todos los socios cumplan con los topes nacionales de bombeo establecidos.
Más concretamente, resaltó que espera que Irak, Kazajistán y Rusia compensen su falta de cumplimiento en el pasado retirando los volúmenes producidos de más, indica el comunicado.
La próxima reunión del comité tendrá lugar el 1 de diciembre, pocas horas antes de la conferencia ministerial del pleno de la OPEP+.