El uso "sin control ni cuidado" de maquinaria amarilla, motores o químicos como el mercurio o el cianuro, tóxicos para los humanos, está afectando al Cañón del Micay, en el que viven varias comunidades que se abastecen de esta "importante" reserva hídrica, por lo que supone un "gran daño" tanto ambiental como humano, indicó el Ejército.
"La maquinaria amarilla, que engañan mediáticamente diciendo que es para carreteras, ha desviado el cauce natural del río y han convertido el agua cristalina y fluida en una sustancia oscura y estancada que aniquila la vida animal y vegetal que depende de la misma", explicó el Ejército en un comunicado.
Se estima que los daños, atribuidos al Frente Carlos Patiño de las EMC dirigidas por 'Iván Mordisco', afectan a unas 16.000 personas que habitan en los municipios de Argelia, El Tambo y López de Micay, del departamento de Cauca.
"El daño que han venido causando las disidencias es tal que en varias zonas ya se han formado 'piscinas' en donde el agua ha tomado colores extraños, evidenciando el uso y empleo de químicos", agregó el Ejército.
Las disidencias, según el Ejército, "instrumentalizan" a la población civil para evitar que las tropas puedan acceder a los territorios en los que operan y para que les informen de movimientos de vehículos para así ocultar la maquinaria que emplean en la explotación ilegal de minas.
El Ejército también acusa a estas estructuras de movilizar a las comunidades para exigir la salida de la Fuerza Pública y poder "recuperar" los terrenos y "retomar" el control de esos territorios y las prácticas ilegales que ejercían en ellos.
"Para ocultar sus operaciones sitúan la maquinaria en las carreteras cercanas al cauce y argumentan que están realizando tareas de mantenimiento de las vías", apuntó el Ejército, y agregó que esa es la razón por la cual lograron llevar la maquinaria a la zona.