Rutte se pronunció en ese sentido después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, firmara el sábado tres órdenes ejecutivas con las que cumplía sus amenazas de imponer aranceles del 25 % a Canadá y México, y del 10 % a China.
Además, el viernes pasado anunció que "definitivamente" impondrá aranceles a los productos que la Unión Europea exporta a su país.
En cualquier caso, hoy Trump confirmó que retrasó un mes la entrada en vigor de los aranceles del 25 % a México tras una conversación telefónica con su homóloga mexicana, Claudia Sheinbaum.
"Tengo que estar convencido de que no tendrá un impacto en nuestra disuasión colectiva", declaró Rutte en una rueda de prensa junto al primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, con quien hoy se reunió en la sede de la OTAN, en Bruselas.
Insistió en que está "absolutamente convencido" de que la organización transatlántica "puede abordar esos problemas".
"Siempre hay problemas entre aliados. Nunca es todo siempre tranquilo y feliz. Siempre hay problemas, a veces más grandes, a veces más pequeños. Pero estoy absolutamente convencido de que no se interpondrán en el camino de nuestra determinación colectiva de mantener fuerte nuestra disuasión", afirmó.
Agregó que en el ámbito de la defensa Washington vende al Viejo Continente más de lo que Europa le vende al país norteamericano.
"Cuando miras a la base industrial de la defensa, está muy claro que Estados Unidos está vendiendo mucho más a Europa de lo que Europa está comprando de Estados Unidos", expresó el político neerlandés.
Starmer, por su parte, reconoció sobre los aranceles que están siendo "los primeros días" y consideró que lo "realmente importante" son "relaciones comerciales abiertas y fuertes".
"Esa ha sido la base de mis conversaciones con el presidente Trump, y sé que se planean intensas discusiones entre Estados Unidos y la Unión Europea", expresó.
Preguntado por si estaría dispuesto a suavizar su intención de reiniciar la relación entre Londres y Bruselas para mantener a Trump "a su lado", Starmer destacó que tanto los vínculos con la Unión Europea como con Estados Unidos son "muy importantes" para el Reino Unido.
"No estamos eligiendo entre ellos, pero esa ha sido históricamente la posición del Reino Unido durante muchas décadas", señaló.
Apuntó que en sus conversaciones con Trump ha tratado temas comerciales, pero también sobre seguridad, defensa y la asociación en materia de inteligencia.
Rutte, entre tanto, afirmó que la defensa de Europa sin la implicación de Estados Unidos "no funcionaría por muchas razones".
"Por muchas razones, tenemos que permanecer conectados. Soy un firme transatlantista. Creo totalmente que lo mejor que puede hacer Occidente es permanecer unido y sé que el mismo pensamiento todavía prevalece en Estados Unidos, también en la Casa Blanca", destacó.