El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa finalizó la sesión con un retroceso de 0,21 dólares con respecto a la última jornada en el International Exchange (ICE), cuando se situó en 64,88 dólares.
Pese a la caída, el Brent continúa moderadamente estable, tras unas tumultuosas semanas anteriores, aunque todavía continúa por debajo de los 65 dólares el barril y registra pérdidas del 13,72 con respecto al pasado 2 de abril, previo al anuncio de aranceles globales del presidente de Estados Unidos (EE.UU), Donald Trump.
El mercado continúa evaluando la escalada arancelaria entre EE.UU y China, después de que Trump anunciase exenciones en productos tecnológicos a los gravámenes del 145 % impuestos contra el país asiático, mientras que Pekín situó sus tarifas a Washington en el 125 %.
Los inversores temen que la guerra comercial entre las dos grandes potencias reduzca el crecimiento económico y la demanda de petróleo a nivel global.
Esta incertidumbre, unido a los planes de aumento de producción de la OPEP+, ha provocado que, en los últimos días, entidades financieras como JP Morgan, Goldman Sachs, UBS, BNP Paribas o HSBC redujeran sus pronósticos sobre el precio del Brent para este 2025 y 2026.
La OPEP y sus aliados revisaron también este lunes a la baja su pronóstico sobre la demanda petrolera global en 2025 y 2026. Estiman que el mundo quemará una media de 105,20 y de 106,63 millones de barriles diarios (mbd), unas cifras inferiores en 150.000 y 300.000 bd, respectivamente, a las calculadas hace un mes.