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Los ministros de Relaciones Exteriores de Reino Unido, China, Francia, Alemania y Rusia se reunieron con su par iraní en Viena por primera vez desde que Estados Unidos abandonó el acuerdo nuclear en mayo.
El presidente Donald Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo multilateral bajo el cual se levantaron las sanciones a Irán a cambio de limitaciones a su programa nuclear verificadas por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Desde ese momento el Gobierno estadounidense ha estado presionando a otros países para que dejen de comprar crudo iraní a partir del 4 de noviembre o sufrirán consecuencias.
Tras tres horas de conversaciones, la jefa de política exterior de la Unión Europea, Federica Mogherini -quien presidió la reunión- leyó un comunicado que reiteró las prioridades ya anunciadas, desde garantizar los ingresos iraníes por crudo hasta las relaciones marítimas, bancarias y otras formas de cooperación en comercio e inversión.
“Los participantes acordaron mantener los avances bajo observación atenta y volver a convocar a la comisión conjunta (...) para promover los esfuerzos comunes”, dijo Mogherini, agregando que todas las partes estaban decididas a encontrar soluciones. La funcionaria no respondió preguntas.
“Todos los compromisos asumidos hoy deben implementarse antes del plazo final de agosto (...), corresponde a los líderes en Teherán decidir si Irán permanece en el acuerdo (...), la propuesta no fue precisa ni completa”, dijo a periodistas Mohammed Javad Zarif, ministro de Relaciones Exteriores iraní.
Más temprano, el canciller francés dijo que las potencias mundiales tendrán inconvenientes para cumplir con ese plazo. “Ellos (Irán) deben dejar de amenazar con romper sus compromisos del pacto nuclear”, dijo Jean-Yves Le Drian. “Estamos tratando de concretarlo (el paquete económico) antes de que sean impuestas las sanciones a comienzos de agosto y luego el siguiente conjunto de sanciones en noviembre. Para agosto parece poco tiempo, pero estamos tratando de hacerlo para noviembre”, agregó.
Los pilares de la estrategia de la UE son los préstamos del Banco Europeo de Inversiones, una medida especial para proteger a las firmas de sanciones secundarias de Estados Unidos, y una propuesta de la Comisión de que los gobiernos de la UE realicen transferencias directas de dinero al banco central iraní.
“Hemos logrado algunos avances, incluso en la protección de algunas ventas de crudo, pero es poco probable que satisfaga las expectativas iraníes”, afirmó más temprano un diplomático europeo. “No sólo lo que los europeos pueden hacer, sino también cómo chinos, rusos, indios y otros pueden contribuir”, agregó.
Funcionarios iraníes habían dicho que la clave para ellos es garantizar medidas que garanticen que las exportaciones de petróleo no se detengan, y mantener el acceso al sistema de mensajería de pagos del banco internacional SWIFT o una alternativa.