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El juez Elio Ovelar resolvió dar lugar al pedido de la defensa de Araceli Sosa, quien estaba imputada junto con Bruno Marabel y Alba Armoa por homicidio doloso y transgresión a la Ley Nº 5777 por el quíntuple crimen ocurrido en octubre del año pasado en la llamada “casa del horror”, en pleno centro capitalino.
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Ahora, la calificación de la imputación de Araceli Sosa cambió a los supuestos delitos de omisión de dar aviso de un hecho punible, frustración de la persecución penal y reducción. A diferencia del homicidio, en estos hechos punibles se aplican medidas alternativas a la prisión, aunque la joven aún continúa preventivamente en la cárcel.
La fiscala del caso, Esmilda Álvarez, había afirmado al término de la investigación que tienen suficientes pruebas para concluir que Bruno Marabel actuó solo en el asesinato de toda una familia.
Las presunciones contra Araceli y Alba ahora se limitan a que no dieron aviso a la Policía, a pesar de tener sospechas de que ocurrió un crimen, y además que ayudaron a Marabel a vender electrodomésticos de las víctimas.
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Araceli Sosa y Alba Armoa habían sido remitidas al penal del Buen Pastor el 10 de octubre del año pasado, mientras que Marcelo Sosa fue a Emboscada, puesto que el Ministerio Público no tenía claro cómo se dieron los hechos, debido a que ellos mismos reconocieron que habían estado en la casa el sábado antes de que se produjera el macabro hallazgo.
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Ya en enero de este año Marcelo fue puesto en libertad debido a que no encontraron pruebas suficientes que lo vinculen con el asesinato de Dalma Rojas, sus dos hijos, su madre Elva Graciela Rodas y su padre Julio Rojas Delvalle.
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