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Los restos óseos fueron encontrados en la vivienda alquilada, en donde funciona actualmente una clínica odontológica. El hallazgo se dio tras el desmoronamiento del piso de una habitación ubicada en el patio trasero.
La fosa tenía en su interior torniquetes de uso médico, restos de botella que serían de suero, un calendario de 1969 y huesos que se analizará si son humanos o de origen animal. El resultado forense del Ministerio Público estará culminado en una semana, informó la periodista de ABC TV Flavia Borja.
Por su parte, el fiscal Ricardo Merlo, que intervino en el caso, indicó que al ceder el piso del patio trasero de esta vivienda se encontraron con la sorpresa de que hay dos habitaciones hechas de ladrillos con un techo abovedado.
“Encontramos algunos elementos como sueros, así como algunas ampollas de anticoagulante, se encontraron dos huesos pequeños (...) Ahora se cerró todo, mañana van a volver a entrar los bomberos voluntarios para buscar si es que hay más evidencias o alguna conexión con otras viviendas aledañas”, explicó.
En ese contexto, el periodista de ABC Cardinal Eduardo Giménez comentó que según la versión de los vecinos en las inmediaciones vivía un simpatizante de la dictadura de Alfredo Stroessner.
Al lugar del hallazgo llegó además Rogelio Goiburú, titular de la Dirección de Memoria Histórica y Reparación del Ministerio de Justicia, dijo que la dirección ya no tiene presupuesto para hacer la búsqueda de las víctimas de la dictadura. Acotó que tienen mucho trabajo pendiente en varios puntos del país y la falta de presupuesto les impide avanzar.
El fiscal Federico Delfino, otro de los intervinientes, mencionó que manejan la información de que la propiedad colindante a la vivienda pertenecía al general Patricio Colmán, vinculado al stronismo.
No obstante, el investigador aclaró que esta versión debe ser corroborada, y en ese proceso se encuentran. Aunque, no se puede negar el hecho de que tanto los vecinos como las personas que están arrendando el domicilio donde fueron encontrados los restos óseos, afirman que la casa sí pertenecía al militar stronista.
El fiscal informó también que anteriormente la propiedad pertenecía a la familia Bacigalupo, y luego fue vendida a la familia Morales. Ahora, el trabajo de la Fiscalía continuará requerir informes para ver quienes fueron los antiguos dueños a finales de la década del 70 del siglo pasado.
A partir de mañana el doctor Rogelio Goiburú, titular de la Dirección de Memoria Histórica y Reparación del Ministerio de Justicia, además de Bomberos Voluntarios y personal del Ministerio Público estarán realizando investigaciones de rigor en el lugar.