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Desde hace días los concejales esteños integrantes del G-7 María Portillo, Javier Bernal, Teodoro Mercado, todos del PLRA, Celso Miranda (Independiente), Herminio Corvalán (Tekojoja), Miguel Prieto (Independiente) y el presidente de la Junta Municipal, Juan Carlos Barreto (ANR) cuestionan la forma de distribución, la calidad y la cantidad del almuerzo escolar que reciben los niños.
Incluso durante sus recorridos en algunas instituciones públicas beneficiadas con el almuerzo escolar los ediles constataron que en lugar de jugo de fruta natural se distribuye a los niños jugo artificial en polvo y que reemplazan con un alfajor, la fruta o ensalada de fruta que deben recibir como postre. También cuestionan la cantidad, dicen que es muy pequeña la ración para el costo que tiene.
La empresa que ganó el año pasado la licitación llamada por la administración de la intendenta Sandra McLeod de Zacarias (ANR) para servir el almuerzo, es Joayu S.A., de María Zulia Talavera de Fernández. El contrato plurianual es de G. 10.343.788.000 por un total máximo de 658.840 raciones, a un costo de G. 15.700 cada ración. Incluye la comida, pan, frutas, postre y un vaso de jugo natural, además de cubiertos y platos de acero inoxidable.
Estos requisitos no se cumplen según indicaron los ediles opositores por lo cual solicitaron que el INAN verifique el origen y la calidad de los almuerzos que reciben los niños esteños.
En tanto que los oficialistas, en cambio solicitaron que el pedido de verificación vaya a la Comisión de Hacienda para que sea analizado antes de dar intervención al INAN.
Los ediles que solicitaron enviar a comisión y de esta manera “congelar” el pedido fueron: Lilian de Aguinagalde, Miguel Ángel Coronel, Perla de Cabral, Juan Ángel Núnez, Alejandro Zacarias, todos estos colorados.