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El Real Madrid realizó un único entrenamiento para preparar la visita al estadio de La Cerámica, que apenas llegó a una hora de duración, con una suave carga de trabajo de Carlo Ancelotti a sus futbolistas.
Dani Carvajal tuvo que parar de ejercitarse por unas molestias en el talón derecho, que hicieron que tuviera que ser atendido antes de reincorporarse a una sesión que tuvo dos ausencias, la de los lesionados Tchouaméni y Alaba.
El francés Tchouaméni sigue apurando sus opciones de llegar a tiempo a la final de la Liga de Campeones del 1 de junio, tras sufrir una lesión de estrés en el pie izquierdo el pasado 8 de mayo, mientras que el defensa autriaco Alaba está descartado.
Alaba se ausentó tras ser sometido a una pequeña intervención quirúrgica esta semana en Innsbruck (Austria), una artroscopia para realizar una limpieza en la rodilla izquierda en la que sufrió la rotura del ligamento cruzado. Hasta septiembre no se espera su vuelta a la competición.
Después de tres días libres que gran parte de los jugadores aprovecharon para viajar y descansar del trabajo físico diario que realizan en la ciudad deportiva, la mañana del sábado la iniciaron con un calentamiento sobre el césped y rondos, antes de ejercicios tácticos y un partido en un campo de dimensiones reducidas. El entrenamiento suave terminó con series de disparos a puerta y lanzamientos de faltas a los porteros.
Ante el Villarreal, tras varios partidos de suplencia en LaLiga por el regreso de Thibaut Courtois, será titular Andriy Lunin, que pugna con el portero belga por la titularidad para la final de la Liga de Campeones ante el Borussia Dortmund.