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Un agente de la subcomisaría 33ª del Puerto Paranambú habría llegado a la vivienda de Valdeir Berle, propietario de 20 hectáreas del inmueble invadido por carperos, para exigirle que retire la denuncia por invasión. Advirtió que quemarían sus casas y matarían a su familia, según denuncia el productor.El presidente de la Coordinadora Agrícola del Paraguay, Hermes Aquino, dijo sentirse impotente ante la situación de terror que viven en la zona y responsabilizó del hecho al ministro del Interior, Carlos Filizzola.
El colono es hostigado por los carperos con complicidad policial, atendiendo a que utilizan a los propios uniformados para realizar la amenaza. Los violentos invasores acechan la vivienda de Berle y con megáfonos amenazan con quemar sus siembras, la casa "y no dejar nada adentro".
Valdeir es padre de dos menores: una niña de 11 años y otra de poco más de dos años. Dijo que teme por la vida de ellos y que viven momentos de terror. "A unos 50 metros de mi casa hay un camino, y por allí pasan permanentemente en motocicletas, autos, camionetas. Se quedan a mirar y a lanzar gestos amenazantes. Es terrorífico lo que estamos pasando", manifestó.
El "brasiguayo" dispone de guardia policial recién desde el domingo. Hasta el sábado, en la comisaría jurisdiccional se negaban a acudir al lugar, pero ante la insistencia del colono, enviaron a cinco agentes que se turnan para custodiar la vivienda.
Lo más llamativo del hecho ocurrió el sábado, cuando supuestamente uno de los uniformados cuya identidad no trascendió pidió al productor que retire la denuncia por invasión de inmueble, que en caso contrario toda su propiedad sería incendiada. Le advirtió que su vida y la de sus familiares corren peligro si no accede al pedido.
Abandonó la casa
Ivani Rubenich Rutsatz, propietaria de unas 20 hectáreas de inmueble que también fue invadida por los carperos, abandonó su casa por temor a que los supuestos sintierras cumplan con sus amenazas. La mujer y toda su familia se están refugiando actualmente en la estancia Espigón, propiedad del sojero Tranquilo Favero, de cuyas tierras pretenden apropiarse los "carperos".
El colono es hostigado por los carperos con complicidad policial, atendiendo a que utilizan a los propios uniformados para realizar la amenaza. Los violentos invasores acechan la vivienda de Berle y con megáfonos amenazan con quemar sus siembras, la casa "y no dejar nada adentro".
Valdeir es padre de dos menores: una niña de 11 años y otra de poco más de dos años. Dijo que teme por la vida de ellos y que viven momentos de terror. "A unos 50 metros de mi casa hay un camino, y por allí pasan permanentemente en motocicletas, autos, camionetas. Se quedan a mirar y a lanzar gestos amenazantes. Es terrorífico lo que estamos pasando", manifestó.
El "brasiguayo" dispone de guardia policial recién desde el domingo. Hasta el sábado, en la comisaría jurisdiccional se negaban a acudir al lugar, pero ante la insistencia del colono, enviaron a cinco agentes que se turnan para custodiar la vivienda.
Lo más llamativo del hecho ocurrió el sábado, cuando supuestamente uno de los uniformados cuya identidad no trascendió pidió al productor que retire la denuncia por invasión de inmueble, que en caso contrario toda su propiedad sería incendiada. Le advirtió que su vida y la de sus familiares corren peligro si no accede al pedido.
Abandonó la casa
Ivani Rubenich Rutsatz, propietaria de unas 20 hectáreas de inmueble que también fue invadida por los carperos, abandonó su casa por temor a que los supuestos sintierras cumplan con sus amenazas. La mujer y toda su familia se están refugiando actualmente en la estancia Espigón, propiedad del sojero Tranquilo Favero, de cuyas tierras pretenden apropiarse los "carperos".