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Además aseguró al medio local Teledoce, que los delitos “bajan desde hace dos años, pero la percepción que tiene la población de eso esta dividida”.
También dijo que desde que se implementó el Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO) en los barrios con mayor número de delitos, aumentó la sensación de seguridad, mientras que en las zonas a las que no llegaba este programa y que presentaba menos delitos contra la propiedad, eso no sucedía.
En este sentido, Bonomi adelantó alguna de las medidas para los barrios costeros de la capital uruguaya: la instalación de las cámaras de seguridad que comenzará el 15 de octubre, mayor cantidad de policías en las calles y la comisaría móvil donada por China que funcionará en un autobús y que centrará el patrullaje.
“Esos ómnibus tienen cámara de video vigilancia desde arriba. Para nosotros esto significa un nuevo impacto”, afirmó el ministro.
El PADO surgió en abril de 2016 como respuesta al incremento de los delitos violentos en ciertos puntos críticos de la capital y departamentos vecinos.
Más de 1000 efectivos trabajan en distintas zonas de Montevideo, Canelones y San José recorriendo los distintos circuitos en móviles, motos o a pie.