Policías de Torín deben volver a la cárcel

El fallo afecta al comisario principal Alcides Velázquez Iriarte, suboficial inspector Eladio Inocente Giménez Caballero, suboficial inspector Gustavo Armando Toledo González, suboficial primero Osmar Antonio Paredes Arrúa y suboficial segundo Julio Darío Díaz Sosa.

Hasta hace minutos, solo el comisario principal Velázquez no se había presentado aún a cumplir la resolución jjudicial. El mismo era el jefe de la comisaría 21ª de la localidad caaguaceña de Torín y los otros trabajaban como personales de planta de la misma unidad.

Los cinco efectivos están ya acusados por el fiscal antisecuestro Federico Delfino por asociación criminal, extorsión y extorsión agravada, aunque gozaban de arresto domiciliario desde el 18 de junio pasado, cuando fueron favorecidos con dicha medida por el juez penal de garantías Carlos Vera Ruiz.

Precisamente, esa resolución del juez Ruiz fue apelada por la fiscalía. Los camaristas Efrén Giménez, Miryam Meza y Nidia Fernández. revocaron esa resolución.

De este modo, los cinco policías deben volver a la Agrupación Especializada para seguir guardando prisión preventiva. El expediente tenía que volver ya al Juzgado para que se emita la orden de encarcelamiento contra los cinco efectivos, quienes al menos hasta hoy no regresaban a prisión pese a que la resolución de los camaristas ya se dio a conocer el lunes último.

En la misma causa están acusados también el oficial primero Walter Francisco Capdevila Benítez y el suboficial principal Emilio Pérez Arce, pero estos no aparecen mencionados en la resolución del Tribunal de Apelación, por lo que en teoría seguirán con arresto domiciliario. Capdevila salió de prisión el 28 de julio pasado y Pérez lo hizo cinco días antes.

Los siete policías próximamente podrían afrontar juicio oral por el secuestro de los novios brasileños Metheus Magiocca (22) y Julia de Lima Venancio (21), quienes fueron retenidos ilegalmente el 18 de enero pasado en una barrera frente a la comisaría de Torín, sobre la Ruta PY02, y obligados a pagar un rescate de 25.000 reales para ser liberados.

Al día siguiente de su captura, la joven fue llevada a Foz de Yguazú por los propios policías para retirar el dinero de un banco, pero como el caso fue descubierto los agentes abandonaron en Ciudad del Este al novio de la chica, a quien dijeron que los matarían si contaban lo que les pasó.

Inmediatamente después, la Fiscalía allanó la comisaría de Torín y arrestó a los uniformados ahora procesados.