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Semanas antes del San Juan ára, las personas se reúnen en sus barrios para participar de la tradicional noche de juegos y comidas típicas. Esta festividad religiosa proviene de Europa y fue introducida en nuestro país por los colonizadores españoles.
En las plazas o parroquias se colocan toldos y mesas para la venta de los platos típicos, como mbejú, pajagua mascada, chicharõ trenzado o pastel mandi’o. Las exhibiciones de estas comidas se convierten en una verdadera tortura para aquellas personas que están a dieta, ya que deben ser fuertes y evitarlas a toda costa. Pero, como decía Óscar Wilde, a veces, la mejor manera de librarse de la tentación es cayendo en ella.
Cuando estamos en el mes de junio, lo primero que todos piensan es ¿quién va a ser el Judas kái del año? Este muñeco cargado de petardos y trapos viejos representa a un personaje detestable por la sociedad, al que durante la celebración los presentes prenden fuego.
En esta festividad, las pruebas son muy practicadas por las jovencitas y las maduritas pero aún solteras que buscan una respuesta a sus vidas amorosas. Entonces, minutos antes de que el reloj indique las cero horas del 24 hacen el juego de la vela, maíz, banana o tinta con la esperanza de que San Juan les diga que sí. Caso contrario, van a tener que esperar hasta el próximo año para volver a intentar.
Tampoco se pueden dejar de lado los juegos tradicionales, principales atractivos de la celebración. Con el grito de "¡viva San Juan!", las personas audaces caminan descalzas sobre tatapýi ári jehasa. Por otra parte, también está la pareja que es llevada a la fuerza para participar del famoso casamiento koygua y los niños disfrutan de la carrera vosa, paila jeheréi o kambuchi jejoka.
Entonces, que San Juan no te encuentre kaigüe este 24, andá a la plaza de tu barrio para correr del toro candil o chutar la pelota tata con tus vecinos. Después, podés darte el gusto de comer los platos típicos más ricos y ver en primera fila quién es el personaje detestable que tuvo la “suerte” de ser el Judas kái del año. ¿Y vos, ya te mentalizaste para subir unos kilitos en estos días?
Por Dahiana Galeano (19 años)