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Surgen así tecnologías de aprendizaje automático que entienden los datos para ayudarnos a responder mejor a ellos; tecnologías de modelado y simulación que pueden probar escenarios y transformar los datos en soluciones reales; y herramientas que reconocen y traducen sonidos, imágenes o videos a nuevas formas de mayor significado. Este tipo de transformación de los datos conduce a mejores planes, diseños superiores y decisiones más inteligentes.
Es así que el uso revolucionario de los datos está provocando cambios y progresos extraordinarios en el mundo. El informe de BSA destaca la manera en que la economía impulsada por los datos incide varios sectores, como la producción, el transporte, la energía, la agricultura, educación y salud. Durante este proceso, se esperan sumar US$ 15 billones al PIB mundial para el año 2030, lo que representa un impulso significativo para la economía mundial. Más en www.bsa.org/data.