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Los técnicos de la entidad monetaria señalaron que la tasa de política monetaria del 6,75% es consistente en un escenario en el que esperan que la inflación se ubique a fines de este año en la tasa del 5%, con un techo de hasta 7,5%, a pesar de que al quinto mes de 2014 la tasa interanual haya alcanzado 7%.
Aunque los técnicos reconocen la persistencia de una presión inflacionaria, explican que irá perdiendo fuerza y que solo afectará a un grupo reducido de productos de la canasta familiar. Agregan que la inflación mensual va convergiendo hacia valores compatibles con la meta de la política monetaria de este año.
El Ceoma consideró en su análisis que la actividad productiva doméstica se sigue expandiendo según lo esperado y que el debilitamiento que se registra en algunos sectores no significa una desaceleración de la economía en su conjunto. En ese sentido, la expectativa de crecimiento económico la mantienen en 4,8% para el presente año.
Sostienen además que en la economía local inciden factores externos que hacen que la evolución no sea homogénea en todos los sectores. En particular, el tipo de cambio depreciado de Argentina, la ralentización de la economía brasileña y un real depreciado, que impactan en la actividad comercial.
Anteriormente, el Ceoma hizo tres ajustes consecutivos desde diciembre de 2013 a febrero de este año, tras haber sostenido en forma invariable en 5,50% durante 16 meses. En tres meses la tasa subió 125 puntos básicos, según registros del BCP.
Los economistas del BCP observaron, al revisar los fundamentos de su política monetaria, que los ajustes que hicieron en ese lapso están dando frutos y, en consecuencia, consideran que una pausa en el proceso de ajuste de las condiciones monetarias es la mejor estrategia a seguir.
No obstante, añaden que el Ceoma observará atentamente la evolución del escenario macroeconómico para definir los próximos pasos de su estrategia de política monetaria. La tasa de esta política marca la tendencia del mercado financiero. Además, el BCP dispone de varios instrumentos para garantizar la estabilidad de la moneda en un marco de precios adecuados al contexto de la economía. La colocación de Instrumentos de Regulación Monetaria (IRM) es una de las opciones que tiene para controlar el flujo de dinero que puede presionar sobre el nivel de precios de la canasta.