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Para evitar la quiebra fue fundamental el aval del Banco Nación, uno de los acreedores que aceptó los términos de la renegociación por expresa instrucción del presidente Mauricio Macri, quien busca salvar a la empresa y a sus puestos de trabajo.
La empresa, fundada por Enrique Pescarmona, entró en cesación de pagos en el 2014 debido a problemas con el gobierno de Venezuela, donde construyó la represa de Tocoma. Ahora la administración de Yacyretá llamó a concurso de precios a tres empresas para comprar dos kits de turbinas tipo Kaplan, que necesitan para reemplazar partes en el parque generador actual, en pleno proceso de mantenimiento. Una de estas empresas es la de Pescarmona, que pugnará por un contrato de US$ 80 millones. Además, sería el primer paso hacia otros dos contratos más jugosos: el de la instalación de tres turbinas en el brazo de Aña Cua (Paraguay), una obra de US$ 550 millones que en años anteriores estuvo a punto de ser entregada a esta empresa bajo la figura del “iniciador privado”, que finalmente fue abortado.
El otro proyecto se relaciona también con Yacyretá, que es la instalación de otras tres turbinas en la actual casa de máquinas, contrato con un costo estimado de US$ 930 millones.
Mientras tanto, Pescarmona lucha por retener el control de la empresa, que podría quedar en manos de sus acreedores, refiere la nota.